Selena Gomez fue una de las asistentes a la Semana de la Moda de Nueva York. Como apunta Elle, la cantante llamó la atención llevando en el peinado una serie de joyas que conformaban la palabra ugly (fea), lo que parece ser un contundente mensaje para el diseñador Stefano Gabbana.
En junio, Gabbana escribió è proprio brutta (es realmente fea) en un post de la cuenta de Instagram de The Catwalk Italia en el que aparecían varios looks de Selena, lo que hizo enojar a mucha gente, por su enfoque inapropiado, sexista, subjetivo y, por supuesto, malvado.
Gomez no había respondido a lo que dijo el diseñador, pero al parecer solo estaba esperando a elegir la plataforma apropiada para expresarse. Aquí la imagen:
¿Cirugía estética?
Por otra parte, Selena recientemente rompió su propio récord en Instagram. Una foto en la que aparece posando con un coctel ―también durante la New York Fashion Week― superó los 10 millones y medio de likes, convirtiéndose en la más gustada en esta red social. ¿La mala noticia? Muchos de los usuarios de la plataforma aseguran que la cantante se aumentó el busto y eso les parece reprobable.
Al parecer, esta “cirugía” ―sobre lo que a fin de cuentas nadie debería opinar― solo es un efecto visual de la imagen. Seguramente Selena sabrá manejar los puntos de vista no solicitados.
¿Kilos de más?
Esta no es la primera vez que la cantante ―una de las víctimas más recurrentes en el body shaming vía social media―responde de manera elegante a las críticas por su físico. “El mito de la belleza: esa obsesión por la perfección física que atrapa a la mujer moderna en un ciclo interminable de desesperanza, cohibición y odio hacia sí misma (…) Yo elijo cuidarme porque quiero, no para demostrar nada a nadie”, apuntó Selena Gomez en marzo.
Esto fue después de que algunos medios difundieran fotos de la cantante en bikini cuando paseaba con algunos amigos en un yate y fuera cruelmente criticada por su supuesto sobrepeso.
