Los va y ven por parte de las autoridades en el caso de muerte por atropellamiento ocurrido en la colonia Reforma no dejan descansar en paz a Jesús Antonio.
El accidente en donde murió Jesús Antonio ocurrió el 21 de diciembre en la calle Escuadrón 201 de la colonia Reforma, cuando el chofer de una camioneta Dodge Durango, con placa de circulación de la Ciudad de México, perdió el control del volante y se subió a la banqueta.
Casi enseguida atropelló a Jesús y después de tirarlo, siguió su carrera para quedar atorado entre la pared de una casa y un poste.
Paramédicos atendieron al atropellado pero luego de la valoración indicaron que no tenía signos vitales y lo hicieron del conocimiento a las autoridades.
En la camioneta involucrada viajaban tres personas quienes fueron rescatadas.
Después de unos minutos, el conductor fue atendido pues presentaba algunas lesiones, para después ser detenido y presentado ante las autoridades que abrieron la carpeta de investigación correspondiente por el delito de homicidio.
Al cumplir 40 días de la muerte de Jesús sus familiares ofrecieron una misa en la parroquia de Juquilita que se ubica en la Primera Etapa de la Unidad Ricardo Flores Magón.
Ante el altar, los deudos, entre ellos su esposa y dos hijos, llegaron acompañados de vecinos, compadres y conocidos, quienes pidieron por el eterno descanso de su alma y a las autoridades exigieron justicia.
Dijeron que el proceso es tardado y se los han repetido por 40 días, en donde solo ha habido viajes a distintas dependencias en donde nadie puede determinar la siguiente etapa a seguir en el mismo, quedando en una ola de va y ven que ha provocado que comiencen a dudar de la justicia del hombre.
