Aunque la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) no ha emitido comunicado en relación al aumento del costo de la tortilla en diversos municipios del Istmo. Esto ha causado indignación entre los consumidores pues aseguran que es un duro golpe a su economía.
Tan sólo en Salina Cruz, el kilogramo de tortillas está en 15 pesos, en otros municipios como Juchitán se mantienen en los 18 pesos, en Tehuantepec en 16 pesos, en Huatulco en 20 pesos, en Chahuites está en 17 pesos.
De hecho, los industriales de la masa y la tortilla establecidos en Salina Cruz, indicaron que el aumento no lo fijaron ellos, debido a que ya se venía manejando principalmente entre los mototortilleros con la intención de generar desestabilización.
Para Roberto de la Cruz, vecino de la colonia Cerro Alto, señaló que el aumento de 13 a 15 pesos el kilogramo de tortillas, es un golpe a la economía para aquellas familias que viven al día con un salario bajo, porque les impiden poder seguirlo costeando y si lo hacen es sacrificando algo que ellos pretendían comprar para la preparación de los alimentos.
“Por qué no consultaron con la ciudadanía mediante un consenso para saber su sentir, si estaban de acuerdo o no, pero como al pueblo no le interesa ninguna autoridad, pues hacen lo que ellos más les convenga”, dijo.
La señora Remedios de los Ángeles, quien acudió a comprar sus tortillas, después de asistir al mercado para surtirse de la despensa, reconoció que cada vez más los productos de primera necesidad que se requieren en el hogar se están incrementando de precio.
“Ya no vamos a poder seguir comiendo tortillas en un futuro si continúan incrementando el costo como hasta ahora lo vienen aplicando los industriales”, dijo.
Por otra parte, organizaciones sociales cuestionaron a los funcionarios de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) por no asistir a las reuniones en donde se trató el incremento del costo de la tortilla, para fijar su postura en torno a esta decisión que ellos consideran precipitada.
