Tres puntos en la Independencia de México
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Tres puntos en la Independencia de México

 


La independencia de México es una fecha que mueve el corazón de todos los mexicanos, pues nos recuerda que, como pueblo, cuando nos unimos podemos lograr grandes hazañas e ir siempre un paso adelante como nación, y a pesar que son tiempos de fortalecer nuestro patriotismo, es una realidad que para que se pudiera gestar dicho movimiento histórico, tuvieron que intervenir diversos elementos, tanto internos como externos, entre los que cabe destacar la influencia de la Masonería para su éxito, y aquí cabe hacer un paréntesis para explicar que es dicha orden.
En la actualidad, la masonería se define como la institución del desarrollo de la filosofía moral, que tiene como finalidad alcanzar la virtud, ese mismo elemento del que nos habla Montesquieu en el espíritu de las leyes como necesario para el desarrollo de la república, recordando que el ser humano es virtuoso por naturaleza, y solamente cuando es ingresado a una sociedad corrupta, tiende a corromperse, justificando así el porqué la Soberanía debe recaer siempre en el pueblo, por lo que, resulta lógico que una asociación humana caracterizada porque sus integrantes cuenten con la voluntad de ser mejores personas, logre desarrollar a sus adeptos en todos los aspectos que lo integran como lo son: físico, emocional, intelectual, psicológico, espiritual, e incluso esotérico; adquieran el imperium para intervenir directamente en el desarrollo de la sociedad a la que pertenecen como género humano, y es así como se explica el porqué la masonería ha tenido gran influencia en la formación de los Estados Unidos Mexicanos desde sus inicios, pues si algo caracteriza a la masonería, es el respeto a los símbolos, alegorías y misterios que les recuerdan su identidad, siendo su máxima obligación cívica flamear la bandera de la patria bajo un cielo de libertad y apoyarla bajo el cimiento indestructible de la justicia.
La independencia de México se gestó tomando en cuenta la influencia de los grandes pensadores de la ilustración que inspiró cambios culturales y sociales a nivel mundial, entre los que cabe destacar la Revolución Francesa, cuyo lema oficial era: “Liberté, Egalité, Fraternité” (Libertad, Igualdad, Fraternidad), mismos principios que rigen a la masonería, y que explica un axioma de equilibrio para el desarrollo de la sociedad, así como los debates de la constitución de Cádiz.
Pero también tenemos que recordar que en esa época, Napoleón Bonaparte había impuesto a su hermano, José Bonaparte como Rey de España, y que lo que hoy conocemos como Estados Unidos Mexicanos, era una colonia española, por lo que el grito de Dolores dado por don Miguel Hidalgo y Costilla el 16 de septiembre de 1810 no hablaba de una nación independiente, sino de la reivindicación del gobierno de Fernando VII, pues se realizó en el siguiente sentido: “Viva nuestra madre santísima de Guadalupe, viva Fernando VII y muera el mal gobierno”, siendo que Fernando VII era un iniciado en la masonería Europea.
Una vez iniciado el movimiento de Independencia, los jefes militares que llegaron a la Nueva España instauraron las primeras Logias Escocesas, distintas a lo que hoy se conoce como Rito Escocés Antiguo y Aceptado, impulsadas por Don Juan O`Donojú, instalando la logia masónica “El Sol” la cual publicaba un periódico con el mismo nombre, convirtiéndose así las logias masónicas en el espacio de desarrollo ideológico y político ante la falta de instituciones y partidos políticos una nación en proceso de alcanzar su independencia plena.
La primer forma de Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos fue el Imperio de Agustín de Iturbide, quien tuvo severos conflictos con el Congreso, conformado principalmente por Masones Escoceses, conflictos que derivaron en su clausura el 31 de octubre de 1822, siendo que en la logias masónicas se fomentaba el espíritu republicano, y como consecuencia el rechazo al Imperio.
En 1825 José María Alpuche e Infante promueve la formación del Rito York en México, considerando ingresar al presidente de la República, Guadalupe Victoria quien ya había fundado la sociedad del Águila Negra para que se opusiera al clero, a los españoles y consolidar así la independencia plena de los Estados Unidos Mexicanos, creando así un grupo denominado “Los Guadalupes”
Una vez instaurada la primer República se generó una disputa ideológica entre los Masones Escoceses, que albergaban la ideología más conservadora, y los masones yorkinos, que albergaban la ideología más liberal, incluso, Benito Pablo Juárez García en su libro “Apuntes para mis Hijos” refiere su pertenencia al Partido Yorkino por su corte liberal, y en 1826 se constituye el Rito Nacional Mexicano como una opción media del conflicto ideológico.
Así podemos ver como la masonería ha tenido una gran influencia en la formación y desarrollo del Estado Mexicano, lo cual podremos ir estudiando en cada una de las transformaciones que como país hemos tenido, pues a pesar que en la actualidad existen diversos ritos reconocidos, como lo son: el Escocés Antiguo y Aceptado, el rito York, Memphis Minsraim, el Nacional Mexicano, derivado de la gran dieta promovida por José de la Cruz Porfirio Díaz Mori, en la que unifica la Masonería en México, dicha institución hoy se considera una gran fraternidad universal con el mismo objetivo: el desarrollo pleno del género humano, y como consecuencia, de la sociedad a la que pertenece.

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