No me defiendas compadre

República amorosa. Constitución moral. La cuauhtemiña para gobernar. Vacilón, qué rico vacilón.
El Mapache Guasón.

El conflicto del señor Ricardo Anaya es de fácil solución.

Los medios han dado a conocer un asunto de apariencia sospechosa, en el cual el señor Anaya compró un terreno en Querétaro al precio de diez millones de pesos; luego construyo en él una nave industrial que se vendió en cincuenta y cuatro millones de pesos, y para que llegara el dinero al candidato se trianguló y envió el dinero de la operación por varios países para que llegara finalmente a manos de Anaya.
Para que tantos brincos si la operación es lícita.

En ese contexto se sospecha que existió lavado de dinero, y el señor Enrique Ochoa Meza Presidente del PRI, señala que los ingresos declarados por Anaya no alcanzaban ni para comprar el terreno y menos para llevar el tren de vida que ha mantenido en Atlanta USA.

El Frente PAN-PRD-MC, ha contraatacado expresando que la PGR se ha convertido en una agencia del PRI y francamente, a mi juicio, Anaya no necesita ni de Diego Fernández De Ceballos ni de otros asesores para defenderse.

Bastaría con probar que el dinero para esas operaciones lo obtuvo de un préstamo bancario como afirma y asunto concluido, pero es el caso que no ha mostrado algún documento que pruebe el origen del dinero para la compra inicial cuando menos.
Así de fácil. Los bancos siempre otorgan créditos y lo documentan ya en un contrato, en una escritura con garantía hipotecaria o en un simple pagaré.

Entonces, al no presentar al menos mediáticamente esa prueba, surge la sospecha de una transacción al menos rara y comprometedora para el candidato.

Por otro lado, pretender acusar a la PGR de ser un instrumento del PRI, bueno, es un contra ataque eficaz, y si se le sazona diciendo que atrás se encuentra el señor Presidente Peña Nieto, caray, están subiendo de tono las apuestas pero qué necesidad.

El señor Ricardo Anaya tiene como lema de su campaña el combate a la corrupción.

Luego, la ciudadanía tiene el derecho de saber si cualquiera de los candidatos es corrupto, lo que ha llegado al extremo de que todas las voces, incluso la de Nuño Mayer, coordinador de la campaña de Pepe Mid, “exija” que la Procuraduría investigue a fondo y dé a conocer los resultados oficialmente.

Los involucrados en este sainete han llegado a límites peligrosos, sobre todo el señor licenciado Fernández De Ceballos cuando afirma en los medios televisivos, que Anaya llegará a las boletas, y lo único que puede impedir que llegue es “que muera o que lo maten”.

Delicadas palabras en verdad, que me hacen recordar que el “Jefe Diego” fue candidato a la Presidencia de la República, justo en el año en que asesinaron a Colosio.
Estoy casi seguro que Ricardo Anaya está diciendo: “No me defiendas compadre”.

Yo también soy pueblo.
Por allí nos encontraremos.