Oaxaca vive un momento muy difícil, de crispación y pobreza: ombudsman

Debido a los hechos radicales que han acontecido en los últimos días: bloqueos, enfrentamientos entre transportistas y ejecuciones, el titular de la Defensoría de los Derechos Humanos de Oaxaca (DDHPO), Arturo Peimbert Calvo, consideró que se vive “un momento muy difícil de crispación y pobreza”.

“Es muy necesaria la protesta social, sí, pero solo si respeta los derechos humanos de las ciudadanas y los ciudadanos, tenemos una serie de cuadernos de antecedentes y medidas cautelares proyectadas sobre estos acontecimientos”, expuso el ombudsman oaxaqueño.

Por ello, hizo un llamado a la Secretaría General de Gobierno (Segego), a generar los mecanismos de seguridad, convivencia y diálogo para que las partes involucradas alcancen acuerdos en favor de la ciudadanía.

“Hacemos votos muy específicos para las instituciones, nada por encima de la ley, ningún acuerdo que menoscabe los derechos de los ciudadanos.

“Oaxaca vive un momento muy difícil de crispación y pobreza, de insuficiencia presupuestal, todo esto repercute en la vida económica en los derechos económicos, políticos, culturales y sociales de los oaxaqueños; es necesario que los sindicatos se incluyan en un diálogo estatal pacíficamente, en Oaxaca no podemos darle un chance más a la violencia”, refirió.

Peimbert Calvo también mostró su preocupación ante la violencia que se vive por la presencia de grupos del crimen organizado en la Cuenca del Papaloapan. “Como defensores hemos vivido en carne propia la violencia que se vive en la región”.

“La Federación debe implementar las medidas necesarias para prevenir que la violencia que se vive en otros estados, como Tamaulipas y Michoacán, llegue a Oaxaca, es muy importante que el país no abandone la entidad”.

Sobre el recurso aprobado para Oaxaca en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2018, consideró que es mediocre. “Es insuficiente e insultante, hay falta de progresividad en los presupuesto y eso repercute en la violación de derechos humanos”.

“Una ausencia de presupuesto justo para atender la pobreza que genera muerte en Oaxaca, es un crimen”, resaltó.