Se pega un trompazo y derrama una botella de leche por mirar embobado a una mujer

Un hombre hace la compra en una tienda y al salir a la calle se fija en una mujer. Al parecer, queda tan ‘hechizado’ por sus andares que es incapaz de girar la cabeza y sigue caminando sin mirar hacia delante, hasta que un seco golpe contra un semáforo le hizo volver a la realidad. Puede que después, volviera a la tienda a por más leche.

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