Desde la juventud el oaxaqueño Emilio Bolaños Cacho dejó su lugar de origen para salir a estudiar a Jalisco, donde terminó la carrera como ingeniero mecánico eléctrico, hace unos días volvió a la Verde Antequera como parte de La Carrera Panamericana.
Fue emocionante, reunirme con la familia, pues tiene mucho que no regresaba, debo darle las gracias a todos, porque me dieron su apoyo y desearon mucha suerte en mi participación dentro de la carrera, espero regresar pronto para estar con ellos nuevamente”.
Bolaños Cacho recuerda la papelería Max que se encontraba sobre la avenida Independencia, propiedad de su padre y a donde dice, “mi papá siempre nos llevaba a trabajar ahí, para que aprendiéramos, estaba muy chico en esa entonces”.
Indica que al terminar los estudios de bachillerato, tuvo que salir de Oaxaca a estudiar, fue la ciudad de Guadalajara, donde continúo su preparación profesional, y fue ahí donde encontró el amor, terminando casándose con una tapatía, por lo que decidió quedarse a vivir allá.
En cuanto a su pasión por los autos declaró, “siempre he sido aficionado, del 2009 al 2014 tome parte en el Porsche Challenge de México, siempre estuvimos dándole fuerte a la competencia, posteriormente participe en el Campeonato de Fórmula Mundial Kart y el año pasado nos animamos a hacer un Sport GT3, y este año venimos a La Carrera Panamericana con un Porsche Carrera 1979”.
Bolaños Cacho tiene como navegante a Enzo Giocoechea, con quien se ha acoplado de manera excelente, para tratar de estar entre los primeros lugares de su categoría.
El oaxaqueño dijo que esta es su segunda participación en La Carrera Panamericana, “ahí vamos sacando la ruta, el objetivo es llegar a la meta en la ciudad de Durango, desde luego quedan muchos kilómetros por delante, pero lo haremos con mucha seguridad y pericia”.
Emilio Bolaños Cacho no pierde detalle del trabajo que personal de apoyo le realiza a su auto para volver a la competencia.
