En Oaxaca, la delincuencia va en aumento. Robos, fraudes y estafas se han vuelto parte del día a día. Uno de los delitos más comunes y silenciosos es el robo de motocicletas y motonetas. Decenas de estos vehículos son robados diariamente y puestos a la venta en mercados informales.
El problema no se limita solo a quienes pierden su patrimonio; también atrapa a quienes, sin saberlo, compran una motocicleta robada. Jóvenes sin experiencia, con buenas intenciones, terminan envueltos en problemas legales por confiar en personas equivocadas.
UNA HISTORIA REAL: FAUSTO, 16 AÑOS, TRABAJADOR Y VÍCTIMA
Fausto es un adolescente común: estudia, trabaja y sueña con ayudar a su madre, quien lo cría sola. Con esfuerzo, ahorró durante semanas 10 mil pesos para comprar una motoneta y así dejar de gastar en transporte público.
Confiado, adquirió una motocicleta de una persona conocida por su familia. Lo que no sabía era que ese vehículo tenía un reporte de robo activo. Días después, al ser detenido por un operativo de rutina, la Policía descubrió el estatus ilegal del vehículo.
Aunque los elementos actuaron con respeto, Fausto fue llevado a los separos. Permaneció ahí por dos horas, hasta que se comprobó que no tenía antecedentes ni relación con el robo. Pero el daño moral ya estaba hecho: ahora carga con la estigmatización de su entorno.
Su madre rompió en llanto al enterarse. No por la moto, sino por ver a su hijo involucrado en algo que no hizo. Fausto solo quería darle una sorpresa.
EL VENDEDOR, LAS EXCUSAS Y LA IMPUNIDAD
Tras el incidente, la familia confrontó al vendedor. Este alegó que el reporte de robo había sido hecho por su expareja como parte de un pleito personal, y que “pronto lo quitaría”. Esa promesa nunca se cumplió, y Fausto pagó las consecuencias de esa negligencia y mala fe.
Hoy, este joven enfrenta burlas, desconfianza en su escuela y su trabajo. Su única “falta” fue actuar con honestidad, sin saber los riesgos que implicaba adquirir una motocicleta sin los documentos adecuados.
¿CÓMO EVITAR SER UNA VÍCTIMA COMO FAUSTO?
Este caso, aunque doloroso, sirve como advertencia. Cualquiera puede ser víctima si no toma las medidas necesarias.
Aquí te dejamos recomendaciones clave:
🔎 Revisa el REPUVE (Registro Público Vehicular) antes de comprar cualquier vehículo usado. Es gratuito y en línea.
📄 Solicita todos los documentos: factura original, tarjeta de circulación, contrato de compraventa y verificación física del número de serie.
⚠️ Desconfía de “buenos precios” o ventas informales sin garantía legal. No todo lo barato es negocio.
🗣️ Consulta con personas de confianza o especialistas antes de hacer una compra. No te apresures.
✍️ Haz contratos por escrito, y si puedes, firma ante testigos o en una notaría.
📞 Si descubres que la moto tiene reporte de robo, no la uses. Acude de inmediato a las autoridades para evitar consecuencias legales.
UN LLAMADO A LA SOLIDARIDAD
El caso de Fausto no debe quedar en el olvido. Él no es un delincuente. Es un joven trabajador, que quiso hacer un gesto noble y fue traicionado por la informalidad, la negligencia y la falta de controles efectivos.
Desde aquí, pedimos a la comunidad:
No juzgar a Fausto, sino apoyarlo.
Compartir su historia para limpiar su nombre.
Exigir justicia a quien vendió esa moto y reparar el daño causado.
En un tiempo donde muchos jóvenes se pierden en malas decisiones, Fausto representa lo contrario: un joven con valores, con amor por su familia, que solo cometió un error de confianza.
Hoy, ayudarlo es tarea de todos. Porque en un mundo lleno de injusticias, limpiar el nombre de un inocente también es justicia.