La noche de ayer miércoles 6 de noviembre de 2024, integrantes del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULT) realizaron un emotivo homenaje de cuerpo presente a las hermanas indígenas triquis, Adriana y Virginia Ortiz García. Las cuales fueron brutalmente asesinadas la madrugada del mismo miércoles. Justo cuando descendían de un taxi al llegar a su hogar en la colonia Francisco I. Madero, en Oaxaca de Juárez. El crimen ha causado una profunda consternación, no solo en las comunidades triquis, sino también en diversos sectores de la sociedad oaxaqueña, que exigen justicia para las víctimas.
Diversas personas afines al MULT se congregaron para rendir un homenaje a las dos mujeres. Quienes eran activistas de derechos humanos y defensoras de la lucha indígena. Con profundo dolor e indignación, familiares, amigos y compañeros de lucha permanecieron en vigilia. Además, guardando silencio y respetando los féretros en los que descansaban los cuerpos de Adriana y Virginia. Cuyos asesinatos han sacudido a la comunidad.
UN CRIMEN DE ALTO IMPACTO
Por otra parte, la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) calificó el crimen como un “delito de alto impacto”. Esto, debido a la violencia y las circunstancias en que ocurrió el atentado. Según las primeras investigaciones, las hermanas Ortiz García fueron interceptadas por sus agresores cuando descendían de un taxi, en plena madrugada. Las autoridades aún no han identificado a los responsables, pero han asegurado que la investigación se llevará a cabo con perspectiva de género e interculturalidad. Dado que ambas víctimas pertenecían a la comunidad indígena triqui. Un grupo históricamente marginado y luchador por sus derechos.
Este caso ha reavivado el clamor por justicia en el estado de Oaxaca, especialmente en las comunidades indígenas que enfrentan tanto la violencia. El MULT ha exigido que se haga justicia de manera pronta. Además, que se castigue a los responsables, en un contexto donde los crímenes contra mujeres y activistas indígenas se están volviendo más frecuentes y desafiantes de investigar.
LA LUCHA POR LA JUSTICIA
Adriana y Virginia Ortiz García no solo eran hermanas, sino también estaban comprometidas con la defensa de los derechos humanos. Particularmente de las comunidades indígenas triquis. A lo largo de sus vidas, ambas trabajaron incansablemente por visibilizar la situación de su pueblo, luchando contra la violencia, el despojo de tierras y el olvido institucional.
El MULT ha reiterado su llamado a las autoridades para que no se dejen de lado las particularidades del caso y se investigue a fondo la posible vinculación de este crimen con las tensiones políticas y sociales que afectan a la región Triqui. En este sentido, también han pedido que se reconozca la violencia estructural que padecen los pueblos indígenas, especialmente las mujeres, quienes se encuentran en una situación aún más vulnerable.
LA PERSPECTIVA DE GÉNERO E INTERCULTURALIDAD EN LA INVESTIGACIÓN
Finalmente, la FGEO ha prometido abordar el caso con una perspectiva de género e interculturalidad, reconociendo la situación de vulnerabilidad y violencia sistémica que sufren las mujeres indígenas. En este sentido, la dependencia ha indicado que se tomarán todas las medidas necesarias para esclarecer los hechos y castigar a los culpables, al tiempo que se garantizará que la investigación sea conducida con el debido respeto a los derechos de las víctimas y sus familiares.