Luego de más de 22 años de espera, finalmente se dictó sentencia contra S.G.R., un hombre acusado de haber cometido un brutal ataque armado en 2002, que dejó con heridas de gravedad a V.A.G.M. o V.A.M. en la comunidad de Camotinchán, en la región de la Costa de Oaxaca. El agresor fue condenado a 22 años y ocho meses de prisión por el delito de lesiones calificadas, además de ser obligado a pagar por la reparación del daño. Así lo detalló la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) mediante un comunicado.
UN CASO QUE PERMANECIÓ ABIERTO POR MÁS DE DOS DÉCADAS
Los hechos ocurrieron el 31 de marzo de 2002, cuando la víctima se encontraba en la mencionada comunidad. Ubicada en el municipio de San Sebastián Ixcapa, en el distrito de Jamiltepec. Según el expediente penal, S.G.R. llegó armado al lugar y disparó directamente contra la víctima, provocándole heridas en distintas partes del cuerpo que pusieron en riesgo su vida.
Durante años, el caso se mantuvo sin sentencia, hasta que finalmente se logró la detención del agresor mediante una orden de aprehensión. Tras su captura, fue presentado ante el juez que lo requería. Con ello, dando inicio al proceso judicial que concluyó con su condena.
EL JUEZ VALORÓ PRUEBAS Y DICTÓ SENTENCIA
Durante la audiencia, el juez que lleva la causa penal valoró las pruebas documentales, periciales y testimoniales, concluyendo que S.G.R. fue responsable del ataque armado. Además de la pena de cárcel, se le impuso el pago de una compensación económica por los daños causados a la víctima.
Finalmente, este caso refleja el impacto de los delitos de violencia armada en comunidades rurales. Donde el acceso a la justicia muchas veces se ve limitado por el paso del tiempo, la movilidad de los responsables o la falta de recursos. La sentencia, aunque tardía, representa una forma de reparación legal y moral para la víctima y su entorno.