“El hombre está condenado a ser libre”
Jean Paul Sartre
El 15 de abril se conmemoraron 39 años de la muerte del filósofo, dramaturgo, activista, periodista, político y escritor francés: Jean Paul Sartre, quien fuera uno de los representantes más destacados del existencialismo y del marxismo humanista. Hizo de las letras, un arma de compromiso con las luchas sociales y políticas de su tiempo. Sartre es considerado el pensador más grande del siglo XX.
Jean Paul Sartre nació el 21 de junio de 1905 en París, Francia. Hijo de un militar naval, quien murió cuando Sartre era apenas un niño, lo cual fue decisivo para su formación y educación. Fue criado por su madre y abuelo, Marie Schweitzer y Albert Schweitzer, mientras la primera le regalaría el amor por la literatura, el segundo lo introduciría en la filosofía.
El joven Jean, no abandonó la corriente intelectual brindada por su familia y en 1929, obtuvo su doctorado en filosofía en un centro elitista, la École Normale Supérieure. En esta época estudiantil conoció a Simone de Beauvoir, “la mujer necesaria” como le decía él, lo que daría inició a una de las relaciones más polémicas, transgresoras e influyentes del siglo XX. Su relación representó una completa ruptura con las formas de vida burguesa tradicional, e influyó enormemente en la creación de nuevos paradigmas que desembocaron en la Revolución sexual que se vivió en la segunda mitad de ese convulso siglo. Su mutua colaboración intelectual y lazo amoroso, los mantendría juntos por más de 50 años, Sartre sería llamado “la conciencia del mundo” y Simone “la madre del feminismo”.
Su formación académica fue rigurosa, en 1933 viaja a Berlín para estudiar la filosofía de Edmund Husserl: la fenomenología. Y la introduce en Francia con un texto excepcional de 1938 titulado “La transcendencia del ego”. Su obra cumbre “La Náusea” fue escrita durante su estancia en Berlín, Sartre tendría poco más de 26 años al concebirla, sin embargo, coincidiría con la llegada de Hitler al poder. El libro más conocido de Sartre es un ejercicio fenomenológico, donde describe su propia experiencia como profesor en un liceo de Le Havre. Para comodidad de mis lectores, explicaré brevemente el concepto de fenomenología: fue un movimiento filosófico del siglo XX, que describe las estructuras de la experiencia tal y como se presentan en la conciencia, sin recurrir a la teoría, deducción o suposiciones procedentes de otras disciplinas tales como las Ciencias Naturales. El cometido de la fenomenología es estudiar la esencia de las cosas, y la esencia de las emociones. “La Náusea” presenta a un joven escritor, que expulsa página por página, su repugnancia e incomprensión hacia todo lo que lo envuelve. Todo está sometido al azar, gravita a su propio ritmo hasta el punto que lo cotidiano adquiere tintes terroríficos. En este libro es reflejada la crisis moral de la sociedad francesa de esos años.
Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, Jean Paul Sartre es prisionero y liberado en 1941, esa etapa en su vida marcaría sus textos posteriores. En 1945 junto a Simone iniciarían un proyecto en común de gran inspiración social. Se trataba de la revista política y literaria “Les Temps Modernes”, en la cual se retrataban sus ideales socialistas
En 1964 rechazó el Premio Nobel que le fue otorgado, porque según él, aceptarlo provocaba perder esa visión crítica como filósofo, ponía en peligro su compromiso con el activismo social y su independencia intelectual.
Sin duda, el trabajo de Sartre sobre el pensamiento es uno de los más prolíferos e interesantes del siglo pasado, y lo expuesto en mi opinión, es uno de los temas mayormente opacados en su trayectoria por ir siempre detrás del existencialismo.
