Triste y ridículo es el papelazo que los dirigentes de la chiquillada perdedora en las urnas hacen al defender fallidamente a los huachicoleros de cuello blanco que pronto serán enjuiciados por la “4taT” de México.
Entiendo que los dirigentes de la partidocracia fallida y derrotada en las urnas defienden a sus respectivos carteles de la corrupción nacional, pero me llama la atención su torpeza para defender a sus jefes. No tienen argumentos contundentes ni autoridad cívica para descalificar lo que el gobierno federal hace a favor de la mayoría de los mexicanos.
Tal es la desesperación de los perdedores en las urnas, que están dispuestos a quemar lo que queda de sus maltrechas naves en defensas de causas perdidas. Defendiendo esas causas muertas, pierden a los pocos seguidores que podrían votar por ellos.
Cualquier ciudadano decente, se pregunta ¿Con que autoridad ética, esos partidos defensores de huachicoleros de cuello blanco, pueden formar a sus cuadros jóvenes para la lucha electoral?
La defensa que la chiquillada resentida hace a favor de los criminales organizados e instalados en algunos reductos de los gobiernos fallidos, retrata de cuerpo entero el arraigo de la corrupción en los partidos políticos que han gobernado desde Los Pinos. ¿Cómo ganar confianza con esos resbalones carentes de honestidad?
Ridículo semejante hacen los periodistas chayoteros de las empresas de comunicación propiedad de la misma oligarquía acostumbrada a robar a la nación, y que aparecen en redes sociales y periódicos en una lista como huachicoleros que cobraban millones en PEMEX. Esos chayoteros están metidos en el dilema “del que sirve a dos patrones, con los dos queda mal” Mal le sirven a sus patrones empresarios, y mal le sirven al noble pueblo mexicano en calidad de comunicadores.
Esos conocidos comunicadores de radio, Tv y prensa escrita, ya no son los líderes de opinión como se auto llamaron por mucho tiempo, resultaron huachicoleros propietarios de gasolineras donde venden gasolina robada, según denuncian las redes sociales de la internet, y ahora son cómplices del crimen organizado que tanto daño hace a la nación.
De los periodistas “chayoteros” de altos vuelos que se dicen defensores de la opinión pública, se sabe también que cobran en varias nóminas de la Sedena y de la Marina, por eso día y noche y fiestas de guardar, afirman que no hay personas más honestas y eficientes que los militares.
No necesitamos bola de cristal, para saber que esos chayoteros salpican de sus embutes millonarios a los dueños de las empresas donde trabajan. Por eso es tarea del legislativo revisar punto por punto el funcionamiento de las concesiones de radio y televisión para que no sigan traicionando a la patria.
Formar una nueva generación de periodistas que sirvan a la sociedad, es tarea de las escuelas de periodismo, mismas que ya están obligadas a revisar sus programas de estudios.
AMLO gobierna escuchando al pueblo y con el pueblo
El Presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a la Cámara de Diputados, hacer los cambios necesarios para que sea civil, y no militar, el mando de la Guardia Nacional, informó Alfonso Durazo, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana ante los diputados federales.
Comentario: Desde esta columna de opinión, siempre pugnamos por desmontar a los militares del gobierno de México, por eso celebro que el presidente Andrés Manuel López Obrador, decida que la Guardia Nacional opere bajo mando civil.
Debo aclarar, que de ninguna manera descalifico al nuevo secretario de la Defensa Nacional, pero si mantengo la sospecha de que su antecesor Salvador Cienfuegos, deja muchos pendientes en la opacidad y en la impunidad en materia de derechos humanos.
No olvidemos que desde que Felipe Calderón mando al ejército a una guerra perdida, los gobernadores y los presidentes municipales llamaron a militares retirados para comandar las corporaciones policiales, pero los militares fracasaron de cuerpo entero durante doce años.
Fueron los militares durante tres sexenios, quienes miraron para otro lado dejando que los huachicoleros se adueñaran de PEMEX y que en muchos casos se asociaran con los carteles criminales como sucedió con el Chapo, hoy preso en Estados Unidos.
Los mexicanos esperamos que en la Guardia Nacional que viene, los militares reivindiquen su imagen ante la conciencia nacional. Por otro lado AMLO deja constancia de que gobierna con la gente, como Jefe Supremo Civil del Ejercito Nacional. Esto es importante. Y ¡Hay que decirlo!
“Nunca subestimen el poder de la palabra escrita”
Es mi opinión. Y nada más…
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