El actual gobierno está en jaque. La movilización magisterial, el emplazamiento a un nuevo plantón, esta vez de 72 horas para el jueves, viernes y sábado de la siguiente semana, la movilización de organizaciones satélites de la Sección 22, como Sol Rojo, en la capital y en diversos lugares del estado, la “mano negra” de diversos actores políticos y del propio gobierno federal para que no explote o escale la protesta o el conflicto han arrinconado al gobierno estatal.
Durante la conferencia mañanera del lunes, el gobernador Salomón Jara, insistió en “finquemos una nueva relación sustentada en la transparencia y en el objetivo de trasformar la educación en nuestro estado”. Sin embargo, en los hechos parece el gobierno estatal ir en sentido contrario a lo que se dice. ¿Cómo confiar, por ejemplo, en una “nueva relación” con el magisterio si, como sucedió ayer, solo escuchamos un listado de compromisos del gobierno y ninguno, ningún compromiso verbal o escrito por parte del magisterio para mejorar la educación?
El asustadizo director del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) hizo un desglose de algunas áreas en que se aplican los más de 27 mil millones de pesos al año. De acuerdo con el Gasto Programable por entidad de la República de la Cámara de Diputados, Oaxaca tiene este año una gran bolsa de 117 mil 680 millones de pesos; el IEEPO y su beneficiario la Sección 22 se llevan el 23% del total del gasto global de Oaxaca este año que debería servir, entre otras cosas, para combatir la pobreza, brindar educación, servicios de salud, infraestructura, etc.
La Sección 22 es directamente beneficiaria de uno de cada 4 pesos con 30 centavos que gasta Oaxaca…a cambio de nada, sin mínimos compromisos, sin rendir cuentas y, sobre todo…sin resultados palpables al menos en el ámbito educativo.
En la conferencia del lunes se enlistó todo lo que se ha ido entregando en la “negociación” (imposición) en favor de la Sección 22: insumos, bonos, entrega de claves a escuelas, pero, sobre todo, las mil 429 plazas a normalistas y se eludió, olímpicamente, dar una cifra global de cuánto costará al erario todas esas “conquistas” magisteriales, con ocultarlo no por eso desaparecerá. El domingo, a partir siempre de cifras oficiales, EL IMPARCIAL realizó una estimación de ¡180 millones de pesos al año!
¿A cambio de qué?
Los 27 mil millones de pesos del IEEPO en 2023 es un presupuesto superior al de un estado como Tlaxcala, que este año ejercerá 26 mil 537 millones de pesos y un poquito menos que los 31 mil 671 que tendrá Colima. Sin embargo, puesto en perspectiva, ¡es superior al gasto en inversión que aplicarán este año 23 estados de la República! El gasto en inversión va de los 19 mil mdp de Puebla hasta los 2 mil 547 millones de pesos de Aguascalientes, este último estado que ha demostrado qué se puede hacer aprovechado bien el dinero.
¿A cambio de qué? ¿A qué se ha comprometido el nuevo liderazgo de la Sección 22 encabezado por Yenny Aracely Pérez Martínez? ¿Dejaremos de ser la vergüenza del sistema educativo nacional?
Nada sabemos.
El gobierno difundió un comunicado oficial “es un aliado de las causas legítimas del magisterio democrático y jamás recurrirá a la mentira, a la traición o a la represión”. Y respecto a la infancia oaxaqueña: hermetismo, nadie ha dicho nada ni se acuerda de ella.
¿Para que servirían 180 millones de pesos? Es casi tres veces el monto de participaciones en Impuestos Especiales para Municipios. Representa 59% del servicio de la deuda que pagará Oaxaca en 2023. La prestigiosa Universidad de la Mixteca recibirá este año 200 millones de pesos, es 3.8 veces los recursos de la Secretaría de Pueblos Indígenas y Afromexicano, más de 57% del recurso de la Comisión Estatal del Agua.
Es 2.3 veces lo que recibe el Hospital de la Niñez Oaxaqueña, con lo que contribuiría a aliviar mucho del sufrimiento de la infancia oaxaqueña y sus familias, carencia de insumos, atención, especialistas y medicinas.
¿A cambio de qué? No lo sabemos.
EL LENGUAJE DEL IEEPO
Para serlo, por lo menos hay que parecerlos, reza el dicho. Si así está manejando nuestros recursos y entra a negociar, el director del IEEPO, Emilio Montero, no rendirá buenas cuentas. Ayer daba cuenta del desglose de recursos por áreas, festejaba “ahorros” de su administración. Aseveró que a energía eléctrica se va 132 millones de pesos que es ¡el 32%!. Solo que le fallaron las matemáticas, el 32% de 27 mil mdp son 8 mil 640 millones de pesos. Dice que en arrendamientos se pagan 78 millones de pesos que es ¡el 23%!. Esa cantidad apenas es el 0.2% del gasto total del IEEPO, el 10% serían 2.7 mil mdp, el uno por ciento daría 270 millones de pesos. Y así por el estilo.
Al encargado de la educación en Oaxaca no le salen las cuentas, o anda fallo en matemáticas. ¿Podemos confiar en que lleve a buen puerto negociaciones en que están implicadas fuertes sumas de dinero?
Además, mimetizados en el lenguaje magisterial insistió en el “verbo” «Coberturar» que según una institución de prestigio como Fundeu “es un verbo innecesario a partir de «cobertura». El verbo tradicionalmente relacionado con ese sustantivo es «cubrir».”
¡Ah! Y nos faltó la supina ignorancia de Saymi Pineda Velasco y su “atención en el servicio al estilo Disney”. Ella tendrá a su cargo la organización de La Guelaguetza, si antes no le corrigen la plana.
¡Con esa yunta hay que arar!, de nueva cuenta recuperamos el dicho popular.