El conflicto agrario fratricida que ha enfrentado a Santa Cruz y Santiago Mitlatongo, esta última agencia de Asunción Nochixtlán, los ha dividido, ocasionado muertos como los registrados la semana pasada, pero evitado a las comunidades ponerse de acuerdo para afrontar algo que si los une: enfrentar la fuerza de la naturaleza y la exigencia de justicia ante el fraude cometido en la zona con la Ciudad Sustentable.
Tanto la ciudad sustentable como un segundo solar serían trasladados los afectados-damnificados del movimiento de tierra y falla geológica que, literalmente, formó 3 lagunas y “se tragó” a las comunidades, desapareciendo hogares, destruyendo construcciones, fisurando caminos.
De este fraude, no podemos llamarlo de otra forma, muchas explicaciones debe el gobierno de Gabino Cué, pero también un personaje como Netzahualcóyotl Salvatierra, entonces secretario de las Infraestructuras, como lo es hoy con Salomón Jara. Con “don” Netza se fraguó el proyecto de reubicación, la construcción de viviendas, infraestructura urbana, escuelas, introducción de electricidad, trazo de calles, drenaje y abastecimiento de agua potable. Una utopía.
Desde julio de 2011 dan testimonios habitantes de los Mitlatongo. Comenzaron a aparecer fisuras por aquí y por allá. En septiembre lluvias torrenciales saturaron la tierra, entre 3 y 4 de septiembre un gran peñasco se desplazó de la Peña Colorada y en las siguientes semanas la tierra, como una esponja, empezó a expulsar el agua acumulada y formar tres lagunas; una de ellas, la de mayor diámetro, devoró las viviendas de alrededores, muchas de ellas construidas por paisanos migrantes.
En 2011 la comunidad fue tragada por las entrañas de la tierra, por cientos de años los habitantes de esta localidad Mixteca vivieron sobre una falla geológica. En total, fueron 400 las familias afectadas.
Es el 21 de enero de 2012, tres meses después de que la tierra engullera Santiago Mitlatongo, agencia de Nochixtlán. Es la tercera visita que Gabino Cué realizaba al lugar al que prometió regresar una vez al mes, incumplió. “Una vez superada la emergencia, se empezará a trabajar en la reubicación definitiva de estas comunidades afectadas”. Pero a don Netza y a Gabino no les corría prisa.
Fue más de un año después del desastre, el 21 de noviembre de 2012 que la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura (ESIA), Unidad Ticomán del IPN entregara el estudio y la propuesta de reubicación en la Loma del Cacalote.
Pedro Vera Sánchez, investigador politécnico manifestó que “en el caso de Santa Cruz Mitlatongo, el movimiento de tierra y el desgajamiento del cerro ocurrió en meses y en algunas zonas en semanas, lo que quiere decir que el movimiento fue muy rápido y por eso este lugar ya no se considera seguro para ser habitado”.
El 11 de febrero de 2012 iniciaron las obras de infraestructura, con la puesta de la primera piedra en el lugar de la reubicación de la población EN Lomas del Cacalote. Y comenzó el manoseo de don Netza y Gabino respecto a la edificación de una Ciudad Sustentable, como nuevo hogar para los mitlatongos.
Fue en 2016 cuando el Gabino Cué hizo entrega formal de las viviendas y, desde entonces, los pocos habitantes que quedaban en Mitlatongo denunciaron falta de servicios, lo intransitable de sus calles con grietas y el creciente riesgo que sufren.
Las deficiencias de las constructoras contratadas por don Netza, Sinfra y el gobierno gabinista los hicieron merecedores de medidas cautelares dictaminadas por la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO). Se indicaba en 2017 que las viviendas entregadas por Sinfra no tienen puertas y ventanas, los techos presentan goteras y algunas casas no fueron repilladas, además de que algunos afectados no recibieron ningún inmueble.
Sinfra, de donde ya había salido Netzahuálcoyotl Salvatierra, manifestó que no aceptaría la medida cautelar, pues argumenta que ¡la construcción de las viviendas no es de su competencia! Olvidó decir que la contratación, seguimiento, vigilancia y pago de obra si le correspondía o tenía algo qué ver. “Sinfra y CVE se niegan a proteger la integridad de 183 familias de Santa Cruz Mitlatongo”, subrayó la Defensoría.
Es 2020, ha pasado casi una década desde entonces y poco más de tres años desde que nació la Ciudad sustentable, “Lo peor de todo es el engaño del gobierno”, dijo convencido Samuel Gregorio López, entonces agente municipal de Santiago Mitlatongo, Nochixtlán. Las calles presentan enormes grietas y los muros de contención en su mayoría cedieron; el sistema de drenaje está colapsado, las aguas negras empiezan a brotar entre las calles y la planta de tratamiento nunca funcionó. Las instalaciones eléctricas se desploman por el mismo desgaje del cerro, el agua apenas llega y es insuficiente para los habitantes que decidieron ir a vivir a esas casas, no les quedaba de otra.
Una ciudad que costó 275.7 millones de pesos, para sus habitantes no fue más que un fraude. En Santiago se construyeron 302 viviendas en un nuevo asentamiento. En 2020 más de 50% de las casas tienen cimientos frágiles, por lo que aún hay temor de que puedan caerse; también temen que los altos muros de contención caigan y puedan ocasionar alguna tragedia.
En Santa Cruz Mitlatongo se construyeron 183 viviendas con todos los servicios básicos, de las cuales 109 fueron entregadas. También dejaron inconcluso el centro de salud y ni siquiera está dado de alta ante los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), razón por la que no puede ser utilizado.
La reciente masacre puso de nueva cuenta a Santa Cruz y Santiago Mitlatongo bajo los reflectores. Hoy la “Ciudad Sustentable” muestra calles deshechas, vialidades sin terminar, casas en obra negra, sin repello, con varillas salientes y, estiman algunos 70% de ellas desocupadas.
A 12 años del desastre, que se cumplieron en septiembre, Netzahuálcoyótl Salvatierra apretó los dientes pues de nueva cuenta los Mitlatongos estaban bajo los reflectores y el fraude de Ciudad Sustentable permanece allá arriba, en la Loma del Cacalote, como obra inconclusa. Debe una explicación y no como lo ha señalado al minimizar los daños en el paso deprimido de 5 Señores y los puentes elevados de ese mismo crucero o el situado en Tlalixtac con evidente falla estructural o la “obra” del CEAMO.
Hay archivos periodísticos, como los empleados en esta columna, que dan cuenta de las felonías, de la deslealtad con el pueblo de Oaxaca.
Le apuestan al olvido y respiran profundo gracias a la división y las disputas entre Santa Cruz y Santiago Mitlatongo, mientras esto se mantenga, don Netza puede dormir ¿tranquilo?
