Caso especial es Andrés López Obrador, escribir de él, al quinto año de su gobierno es poco objetivo, sin embargo, podemos decir que AMLO mantiene la visión criolla del país. Es un reformista y no pretende cambiar el sistema neocolonial, solo sacarlo de la ruta de colapso inminente que llevaba con el sistema neoliberal. Luchar en contra de la corrupción, que viene desde los tiempos coloniales, se antoja imposible, pero lo está tratando de hacer y eso se debe reconocer.
Solamente los corruptos, los ignorantes y los débiles mentales pueden estar en contra del proyecto. Sin embargo, para AMLO, las grandes reformas de México se dan en 1824, 1857, 1917 y en su gobierno. La “4T” percibe a este país solo desde el siglo XIX, y los 9800 años anteriores no los contempla, no son parte de la nación. Nosotros creemos que antes del siglo XIX, en esta tierra se han llevado a cabo, por lo menos, 13 grandes reformas, comenzando con la invención de la agricultura y el maíz.
Tratar de comprender la realidad histórica y cultural de este país, sin la presencia de la civilización del Anáhuac, es no entender la realidad y la esencia. Ese es justamente uno de los problemas básicos de los gobiernos criollos. Hacerlo así, es gobernar a un país sin pueblo. Guillermo Bonfil le llamó “El México imaginario”. Excluir la historia y la cultura de la civilización Madre, es salirse de la realidad. Es crear un país imaginario en permanente choque con la realidad.
Los criollos han tratado de hacer del Anahuac, una ficción española, francesa y ahora norteamericana, siempre con copias, mal hechas, tardías y grotescas. Luchando contra ese pueblo terco y atávico que no quiere cambiar, en un “sí, pero no”, permanente. A diferencia de India o China que se conciben a sí mismas con su milenario legado histórico. Los criollos lo niegan y excluyen. Pero, no es casual, que aquellos personajes de estirpe anahuaca, que entran apretadamente en la historia oficial del país de los criollos y para los criollos, vienen de la matriz cultural y étnica de la civilización del Anáhuac y están vinculados con el corazón del pueblo.
Los héroes anahuacas de este país, todos fueron traicionados y ejecutados por la ideología criolla: Vicente Guerrero, Emiliano Zapata y Francisco Villa, por solo nombrar a tres de la otra cara de realidad. La historia oficial del Estado mexicano, en lo que refiera a la invasión y la caída de Tenochtitlán, solo les da voz a los vencedores, Hernán Cortés. Bernal días del Castillo o Bernandino de Sahagún, por citar solo a tres, pero en esa historia de los vencedores no aparecen, para nada, Las voces de Malinche, Cuauhtémoc o Cuitláhuac.
Y los estudios más recientes para descolonizar la historia como es la investigación que realizó durante siete años en las bibliotecas y archivos de Europa de la Dra. Eulalia Guzmán Barrón, quien demuestra que lo escrito por Cortés es falso, impreciso y tendencioso. Por supuesto que la publicación de la obra “Relaciones de Hernán Cortés a Carlos V sobre la invasión de Anahuac”, ha sido plaqueada en la SEP, y que, hasta ahora no se haya publicado, donde demuestra la falsedad del escrito.
La patria criolla tiene a sus héroes, comenzando con el llamado Padre de la Patria, Miguel Gregorio Antonio Ignacio Hidalgo y Costilla Gallaga Mandarte y Villaseñor, el primer presidente del México Imaginario, José Miguel Ramón Adaucto Fernández y Félix, un criollo que se cambió el nombre para engañar al pueblo indígena con nombre sugerente de Guadalupe Victoria, Antonio López de Santa Anna Pérez de Lebrón, etc. Pero el Anahuac, una de las seis civilizaciones más antiguas y con origen autónomo del mundo tiene desde hace diez mil años la fuerza y el poder de la Matria, que es la Cultura Madre, la que no solo nos ha dado un rostro y un corazón verdadero, sino la que nos ha dado la sabiduría para alcanzar los niveles más altos de plenitud armónica para todos los pueblos anahuacas en los mil años de esplendor del llamado Periodo Clásico, sino también nos ha dado el maíz, la milpa, la nixtamalización, la herbolaria, los valores y principios de primer sistema educativo del planeta que siguen vigentes hasta nuestros días, la más antigua democracia participativa del mundo vigente en las cientos de comunidades llamadas indígenas, y sobre todo, la sabiduría para poder resistir estos cinco siglos de injusticia y despojo de los extranjeros, en la Colonia de los gachupines y los dos últimos siglos de la neocolonia de los criollos. Educayotl AC. 13 febrero 2022.