Guillermo del Toro: El monstruo tapatío
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Opinión

Hojarasca Cultural

Guillermo del Toro: El monstruo tapatío

 


“Si puede ser escrito o pensado, puede ser filmado”
Stanley Kubrick

Tras el recorte de presupuesto del gobierno federal a la SEP, que afectó a las becas del Conacyt, la Sociedad Matemática Mexicana se vio en la necesidad de buscar el financiamiento de los equipos de niños que representarán a México en dos competencias mundiales (la primera en Sudáfrica y la segunda en Reino Unido), ya que lo otorgado por el Conacyt para el transporte era insuficiente. Luego de que la Sociedad Matemática Mexicana lanzará un comunicado vía Twitter, pidiendo donaciones para cubrir el costo de cuatro boletos de avión que hacían falta para la competencia en Sudáfrica (el equipo es compuesto por 12 integrantes), el cineasta mexicano y ganador de dos óscares en 2018, Guillermo del Toro, se ofreció a pagar el costo de los boletos de esos cuatro niños restantes. La propuesta de cubrir los gastos fue hecha el viernes 24 de mayo, misma que el director de cine cumplió el miércoles 27 de mayo y se comprometió además, a pagar también el viaje de alumnos y maestros para la segunda competencia en Reino unido. El cineasta mexicano, durante toda su carrera ha estado orgulloso de sus raíces, razón por la que ha dedicado varios de sus premios a jóvenes entusiastas (mexicanos y latinoamericanos) que sueñan con hacer algo fantástico. Guillermo del Toro durante su carrera artística y profesional, ha logrado combinar el terror con lo mágico y lo místico con la muerte. Nos ha mostrado el lado sensible y bello de las criaturas oscuras; y nos ha dejado entre ver que, si en las historias hay algún villano, somos los seres humanos. La pregunta que muchos de nosotros nos hemos hecho sobre su residencia en el extranjero (si ama tanto nuestro país), tiene razón en que su padre fue secuestrado en 1998, y liberado después de un pago realizado a los secuestradores, este suceso hizo un surco muy grande en la vida del jalisciense, por lo que decidió emigrar dada la inseguridad en México, además de tener más oportunidades de crecimiento en Hollywood. En Guadalajara, estudió en el Centro de Investigación y Estudios Cinematográficos, pasó diez años en diseño de maquillaje y formó su propia compañía Necropia antes de ser productor ejecutivo de su primer filme a los 21 años, titulado “Doña Herlinda y su hijo”. Es cofundador del festival del cine en Guadalajara, y creó una compañía de producción llamada “Tequila Gang”. Su tercera película dirigiendo fue “El espinazo del diablo” y la cuarta película “Blade II”, protagonizada por Wesley Snipes. En 2006 su película “El Laberinto del Fauno” fue la primera película de fantasía en ser nominada en la categoría de mejor película de habla no inglesa en los Oscar, y al finalizar la película en el festival de Cannes recibió 22 minutos de aplausos. En 2009, del Toro lanzó junto a Chuck Hogan “Nocturna”, su primera novela con el tema de vampiros. Este libro fue el primero de “La trilogía de la oscuridad”; En este debut literario su lanzamiento fue simultáneo tanto en inglés, como en español.
En 2018 estrenaría “La forma del agua” película nominada 17 veces en los Premios Oscar de ese año, y ganaría dos de ellos. Para dicha película se inspiró en un poema escrito por Hakim Sanai, poeta persa del siglo XII, el verso es recitado por el narrador en la escena final de la película: “Incapaz de percibir tu forma, te encuentro a mi alrededor. Tu presencia llena mis ojos con tu amor, vuelve humilde mi corazón, porque estás en todas partes”.
Siempre he pensado que lo que distingue a un escritor, guionista, dramaturgo, cineasta o cualquier otro hombre o mujer de letras, es su capacidad de contar las mismas historias con estilos diferentes, esa es la particularidad y característica de cada uno. Y eso es lo que distingue a Guillermo de otros cineastas.