¿Partido político, candidato o políticas de Estado?
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¿Partido político, candidato o políticas de Estado?

 


¿Sabe usted que son las políticas de estado?, si consideramos –como muchos autores coinciden- a éste término, como los principios básicos que rigen a un gobierno para guiar su actuar, no a corto plazo, sino un camino que a pesar de cambiar los colores o ideologías de quienes se encargan de gobernarlo (partidos políticos) seguirá funcionando, tienen fecha de caducidad y sus momentos de controles para que se cumplan, a usted, ¿Qué tanto le afectan?, ¿Conoce las que rigen al actual gobierno?

Pareciera que cada que hay cambios de gobierno, se trajeran junto con los planes de desarrollo de los sexenios nuevas políticas de estado, sin embargo, eso sólo son acciones del actual gobierno, vamos, es la política que traen quienes están al frente y buscan que se puedan medir sus acciones de acuerdo al compromiso que hacen con la ciudadanía, desde luego muchos de estos compromisos no se cumplen, por ello el enojo de los habitantes, y la quema al menos social, que se hace de sus funcionarios y de quienes ejercen el poder de gobernar.

La mayoría de los proyectos de nación o políticas de estado, tienen en su interior temas de educación, salud, gasto público, la seguridad, entre otros y con ello las acciones que se realizarían para que la ciudadanía tenga la percepción que estamos mejor; sin embargo, esto hace varios años que no sucede, percibir que estamos mejor y lo que cada quién considere que es “estar mejor”.

En estas últimas fechas, escuchamos por todos lados, cómo los “precandidatos” (y lo pongo entre comillas, porque en realidad serán los candidatos), se atacan de forma personal y también se atacan por los actuares de los partidos a los que pertenecen, ya que todos, sin excepción de alguno, han tenido actos de corrupción, se han beneficiado de los vacíos de poder y han buscado convencer a los ciudadanos que “ellos” son los menos malos, acompañados desde luego, por un organismo autónomo cuya chamba es la de convencer a los pobladores que voten por uno, para que se pueda justificar la derrama económica que año con año hacen al haber elecciones; pero y ¿el proyecto de nación a largo plazo?, aquel en que por ejemplo, usted disfrutará de una jubilación digna de quién contribuyó a la infraestructura de un país fuerte, donde pueda gozar de esa seguridad en salud, en casa y entorno social, de esas políticas de estado que nos están llevando a ser competitivos y que no hagan tan débil nuestra economía, en donde las simples declaraciones de un loco que gobierna a uno de los países más poderosos del mundo devalúen nuestra moneda, o que las acciones que tomamos en materia de educación, realmente, ayuden a que nosotros y nuestros futuros profesionistas, contribuyan a dar soluciones de fondo a la desigualdad, pobreza, riqueza, entre otros, ese “plan” donde queda, o cada que cambien los colores de quién quede al frente, se podrá sustituir sólo porque se le prometió a la gente.

No está usted cansado de ver los ataques de diferentes personajes pseudo-revolucionarios, cuyo actuar se basa en el miedo, la inestabilidad, el encono y el chantaje que provocan, para que nuestro actuar sea de acuerdo a los intereses de un grupo de poder, que lejos de beneficiarnos, sólo nos utilizan, para sus perversos fines; ¿qué no alcanzamos a ver?, quién quede al frente del gobierno, buscará cumplir con sus promesas, pero quién quiera derrocarlo, hará las mismas campañas de terror que hemos sufrido en estos años, azuzando a la población para provocar aumentos de la delincuencia, aumentos de violencia, creación de políticas económicas que beneficien sólo a los cuates, entre otras atrocidades.

Considero a título personal que la solución de nuestros males, no está, en darle demasiado peso a quienes nos gobiernan, ¿para qué seguir manteniendo a los parásitos de los partidos que se cambian de nombre y buscan seguir mamando del erario público?, ¿para qué tantos políticos que no saben dar solución a las demandas de un pueblo que lo alimentan del morbo y la mentira?, envenenado a las familias que dicho sea de paso, hoy día pelean entre ellos por candidatos que ni de su familia son, no está en los partidos y los políticos la solución de nuestros males, hemos estado buscando en lugares equivocados, el peso que deben tener nuestros gobernantes, es el de aplicar acciones efectivas que nos ayuden a estar mejor todos, en conjunto, no sólo unos cuantos, ¿para que tantos senadores y diputados?, que no vemos que no son efectivos en sus actos, ¿para qué tantos partidos?, que sólo terminan para hacer coalición y evitar perder su registro, si al final del día sólo quedan solo dos o tres propuestas, cuyos candidatos y partidos quedan ante el pueblo con imágenes tan dañadas que tienen que redoblar esfuerzos para convencer al resto que no es cierto lo que se dijo de ellos, ¿para qué tanto bombardeo promocional para decidir el voto?, si la mayoría de los ciudadanos lo decide el mismo domingo que va a emitir su sufragio y aun con dudas, casi, casi, como cuando alguien presenta examen y le pregunta a su compañero de al lado, la respuesta correcta, a ver si pega.

La solución, siempre estará en nosotros, en la educación que le demos a nuestros hijos, en hacernos responsable de nuestros actos, esos actos que consideramos tan simples como cuando nos quedamos en doble fila “un momentito” justificándonos que no hay lugar y estamos apurados, sin visualizar que ese acto, retrasa a los que vienen atrás, puede ocasionar accidentes, podemos hacernos acreedores a multas que debemos cubrir por la violación a las normas y leyes que está establecidas para evitar problemas sociales; otra solución está en hacer bien nuestro trabajo, porque de ello depende el crecimiento social y la calidad de nuestros servicio, si nos pagan por hacerlo o si pagamos por que lo hagan, que la retribución sea en función de ello, sin el engaño, sin el abuso, entre otros.

Si tiene ganas de sumarse a la pelea de los partidos, mejor peléese con sus vicios, con la ignorancia que todos acarreamos, no pierda sus fuerzas en trabajar en tierra infértil, que la propia seguro necesita ser nutrida ¡Es cuanto!

Twitter@g_vasquez