“Los hombres de Estado son como los cirujanos: sus errores son mortales”, decía el periodista, crítico y escritor francés, FranÇois Mauriac. Y es verdad, por eso, los errores de los funcionarios públicos, son inaceptables en un gobierno pues, para eso, quien lo encabeza, tiene el tiempo suficiente de escoger a las mujeres y hombres más capacitados para un cargo, y éste debe ser honesto en aceptarlo o rechazarlo, según sea el caso.
Entre los estadistas nacionales, tenemos el ejemplo claro de Don Benito Juárez García, quien supo rodearse de los mejores hombres para gobernar en medio de una terrible crisis en la que México estaba envuelta.
Sin la inteligencia de Juárez y el talento de su gabinete, el país hubiera sucumbido y la historia fuera otra; sobre todo cuando el país era ambicionado por potencias como Francia o España.
Quien piense que gobernar es fácil, está en un error. Gobernar no es solo dar órdenes u obedecerlas, sino ser consecuente consigo mismo, porque ya lo dijo Confucio: ¿Uno que no sepa gobernarse a sí mismo, ¿cómo sabrá gobernar a los demás?
En México es muy común que los gobernantes llamen a ocupar cargos públicos al compadre, al amigo o al familiar, no obstante que éste carezca de conocimientos para hacerlo. Otros llegan al gobierno por la cantidad de dinero que aportó a la campaña del candidato y éste le paga con un cargo público para que ahí, de las arcas del pueblo, recupere el dinero invertido.
No decimos que este sea el caso de Oaxaca, pero sí ha ocurrido en gobiernos pasados, donde los funcionarios que han ocupado cargos públicos importantes han completado su administración de manera oscura, como es el caso del gobernador Gabino Cué Monteagudo, que metió a Oaxaca en el atraso, debido a su incapacidad para gobernar. O el caso de un de locutor que fue incapaz de gobernar la ciudad de Oaxaca.
Hace unos días, las secretarías de Turismo estatal y federal emitieron una invitación a los prestadores de servicios de los destinos turísticos y Pueblos Mágicos del Estado de Oaxaca al curso, “Atención en el Servicio al estilo Disney”.
¿Al estilo Disney? ¿Un estado que presume de sus raíces indígenas, se está agringando?
Este error del Gobierno del Estado, volvió a causar revuelo en las redes sociales al convertirse en tendencia nacional. El nombre de la titular de Turismo, Saymi Pineda volvió a ser tema de conversación, como en marzo pasado, cuando la Secretaría de Turismo le retiró el primer lugar del concurso del cártel Guelaguetza 2023, al pintor, Luis Fernando Cruz Ramírez por un supuesto plagio en una fotografía de Diego Huerta.
Estos errores no deben permitirse en un gobierno, porque lo ponen en evidencia; exhiben la incapacidad de los funcionarios públicos que, se supone, tienen la capacidad para estar en un cargo sin cometer errores. Más, cuando estos errores se repiten como es el caso que nos ocupa. Ahora esperemos como sale la Guelaguetza, si tomamos en consideración que gran parte de la organización descansa en la Secretaría de Turismo del gobierno estatal. Ojalá que las coreografías no sean al estilo Disneylandia, ni el ratón Miguelito baile la Danza de la Pluma, o Mimí aparezca entre la delegación de las Chinas Oaxaqueñas, sino sería el acabose.
La función pública pues, tiene sus bemoles. Independientemente de la paga que reciben los funcionarios, es una responsabilidad que el funcionario tiene que asumir, un compromiso y una responsabilidad a toda prueba. No es solo alargar la mano cada quincena para cobrar el salario; es aplicar todo el talento para cumplir con el encargo y entregar buenas cuentas al pueblo. Por eso, un funcionario es honesto cuando renuncia al cargo, cuando ve que no puede cumplirlo, sin importar lo que diga la clase política. En fin, esperemos que en la Secretaría de Turismo y en todo el gabinete, cesen los errores y enderecen el rumbo.
¿PARO INDEFINIDO?
Hasta este domingo, los profesores de la Sección 22 han decidido irse al paro de 72 horas, porque las demandas no han sido satisfechas por el gobierno federal. Es más, en la reunión pasada con la titular de la Secretaría de Educación Pública, esta funcionaria abandonó la mesa de trabajo, lo cual indignó a los maestros oaxaqueños.
Se ve que los profesores oaxaqueños no abandonarán su postura dura ante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, sabedores que es un aliado, pues ellos, en Oaxaca, le dieron votos para su triunfo.
Mientras tanto, los que habitamos en la ciudad de Oaxaca habremos de soportar tres días de bloqueos de cruceros, problemas en el transporte, y los padres de familia, la angustia porque sus hijos se quedarán sin clases.
De irse los profesores a un paro indefinido, que al parecer todo hace suponer que así sea, el rezago educativo seguirá predominando en la entidad oaxaqueña. Esperemos que el diálogo funcione y que, tanto el gobierno federal, como el estatal, así como la base magisterial, permee la cordura y no se siga dañando al futuro de México, que es la niñez.
