Arturo Pérez: Miembro de la Real Academia Española desde 2003, reportero de prensa, radio y televisión durante 21 años (1973-1994), cubriendo conflictos internacionales. Trabajó durante doce años en el diario Pueblo como reportero y nueve en Televisión Española cubriendo los servicios informativos relacionados con conflictos armados.
El escritor Arturo Pérez-Reverte se volvió tendencia al contestar a la petición que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para que el Rey Felipe VI de España ofrezca una disculpa por lo que cometió Hernán Cortez hace 500 años durante la conquista.
Sobre esa ofensa deslenguada de ese novelista español al Presidente Andrés Manuel López Obrador, no merece atención especial. AMLO no necesita defensa, él lo sabe hacer con lucidez histórica y contundencia ética.
Entiendo muy bien que los “fifís” españoles en México estén resentidos porque sin ánimos de ofender, algunas empresas españoletas y la iglesia pierden privilegios con la “4T” de México que ya está en marcha y nadie la puede detener.
Los españoles de América y de cualquier otro continente, saben que en México hay libertad de expresión, derecho que se respete igual que todos, incluyendo a reporteros extranjeros que critican a las máximas autoridades.
Eso sí, me sorprende el silencio de los intelectuales de la Real Academia de la Lengua Española en México. No por la crítica, sí no por lo impropio y lo fuera de lugar del lenguaje ofensivo de un novelista extranjero que en México ha recibido un trato respetuoso, como lo reciben los periodistas de todas las naciones.
Qué cantidad de súbditos tiene el rey de España en estos lares. Andan vueltos locos pidiendo la hoguera para quien considera saludable y honroso celebrar los 500 años con una disculpa. Lo han hecho otros países, lo hizo la iglesia. ¿A qué viene esa santa indignación de la derecha?
Así las cosas, los mexicanos libres y demócratas esperamos que don Marcelo Ebrard Secretario de Relaciones Exteriores y los senadores encargados de la diplomacia nacional tomen cartas en el asunto. Digo, si no es mucho pedir.
Reporteros de prensa son muy mal pagados
En la mañanera del lunes pasado, AMLO habló sobre las relaciones laborales de los reporteros y sus patrones, tema que permanencia como tabú porque resulta incómodo para los empresarios dueños de los medios masivos de comunicación.
Por años fui reportero, por eso opino con suficiente conocimiento del tema. Los reporteros son mal pagados aunque su trabajo sea profesional. Además, los reporteros injustamente todos son metidos en el costal de los “chayoteros” y no es así; los hay honestos y con una vergüenza social que la mayoría de los políticos no tienen.
El reportero, aparte de que no tiene horario de entrada ni de salida, trabaja mucho más de las ocho horas. Si algo importante sucede, tiene que cubrir sus fuentes a cualquier hora de las 24 del día sin cobrar horas extras.
En cuanto a prestaciones laborales, mejor ni hablamos. En una empresa, me vi obligado a renunciar porque se me negó inscribirme al INFONAVIT para tener un techo para mi familia. Si, de ese tamaño. Son muy pocas empresas que permiten que sus reporteros formen sindicatos para defender sus derechos. Yo lo intenté y siempre fracasé.
En la prensa regional tenemos el mal ejemplo de la Sociedad Iberoamericana de Prensa (SIP). Esta organización no asocia a reporteros, agrupa a empresarios que niegan los derechos laborales a los redactores que se juegan hasta la vida haciendo el trabajo de campo.
Queda claro que: No todos los periodistas son “chayoteros”, ni todos los “chayoteros” son periodistas. Los chayoteros voraces en muchos casos, no saben ni redactar una nota. Esto es importante. Y ¡Hay que decirlo!
“Nunca subestimen el poder de la palabra escrita”
Es mi opinión. Y nada más…
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