Morena, el PRI 4.0
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Opinión

BARATARIA

Morena, el PRI 4.0

 


Y dijeron que no eran lo mismo. Pero Oaxaca fue escenario de las viejas, rancias prácticas de acarreo, embarazo de urnas, de la violencia política, pero no ahora contra contrincantes o “adversarios”, es una guerra fratricida al interior del mismo partido: el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).

¿Cuál es la importancia del proceso escenificado el fin de semana? La elección de tres mil congresistas, 10 por cada uno de los 300 distritos electorales que moverán los hilos del morenismo en los próximos años. El olor a hueso, y sangre movilizó a las huestes morenistas. En el Paseo Juárez, El Llano, se vieron largas filas para afiliarse o refrendar la militancia ciudadanos de todos los estratos sociales. Hombres y señoras bien quienes, luego de cumplir su “deber cívico”, llenaron los restaurantes fifís que rodean al parque.

Un mesero, un comensal, de manera inocente llegó a preguntar. ¿Cuántos de estos “izquierdistas” hoy fueron hace algunos pocos años priistas o panistas?; los denunciaban las mismas actitudes, los abrazos, el lenguaje de “hermano”, de “compañero”, al fin, las mismas ambiciones. Y, claro, siguen siendo operadores políticos, pero ahora con piel guinda.

El tercer Congreso Nacional de Morena será los días 17 y 18 de septiembre en la Ciudad de México y los ganadores llevarían mano para un cargo de representación popular o tendrían injerencia en la elección de candidatos.

En la capital hubo señalamientos contra un ex guerrillero, el propio presidente municipal o la diputada Lizett Arroyo de obligar a los trabajadores del ayuntamiento para amarrar una posición. En Pochutla, al parecer, los artilugios permitieron a Samy Pineda amarrar un lugar. En Matías Romero, hubo quema de boletas y robo de urnas. La mirada estaba puesta en la presidenta municipal Obdulia García, quien buscaba favorecer a su hija Alejandra Ventura. El que se cuece a parte es Óliver López, presidente de Santa María Petapa, con señalamiento de implicaciones del crimen organizado.

En Huatulco, en Tuxtepec, Pinotepa Nacional, Salina Cruz, se reeditó el llamado de quienes se creen dueños de la franquicia regional para que votaran por ellos. Laura Estrada Mauro, diputada ligada a Salomón Jara, publicó en redes sociales el respaldo a su sobrina Irma Morales Mauro y al regidor de Tuxtepec, Elías Olivera González.

En un periódico nacional leíamos una nota sobre tres adultos mayores que salían del lugar de votación: “No queremos perder nuestra pensión”. Muchos no sabían ni a qué iban.

 

GUELAGUETZA, EL AGANDALLE

Y así como se les salió de las manos a las autoridades en los primeros procesos de vacunación anticovid, donde personas apartaban lugares hasta en 50 y 100 pesos, se repitió con las presentaciones de la Guelaguetza y los conciertos que se anunciaron para julio y parte de agosto, con el “agandalle” y reventa de boletos a plena luz del día.

Aunque en el Primer Lunes del Cerro en sus dos presentaciones se denunció en redes sociales la reventa de boletos o la venta de varios falsificados, las autoridades del Gobierno del Estado no pudieron evitar que lo mismo pasara con la tercera y cuarta ediciones, porque en redes sociales ya se comercializaban los asientos de los Palcos A y B, sin garantizar su disponibilidad.

Los revendedores, sin pena alguna y ante la mirada de personal de seguridad en la zona, ofrecían boletos a las y los turistas que buscaban cómo ingresar aunque fuese en las zonas C y D, sin imaginar que serían estafados.

Tal fue la minita de oro que se encontraron con las festividades por la Guelaguetza, que hasta en el concierto de Lila Donws se les vio muy animados con hasta cinco boletos en mano, ofreciéndolos hasta en mil 500 pesos y prometiendo lugares cercanos a la artista.

Varios fueron los que cayeron en el engaño con boletos falsificados o los que tuvieron que pagar más de lo que costaban en realidad, ante la complacencia de las autoridades que no estuvieron atentas para evitar este tipo de acciones que solo dan una mala imagen al estado.

 

EXPLICACIONES DEBIDAS

Se acumulan irregularidades en la Guelaguetza comercial y que deberá explicar Juan Carlos Rivera Castellanos, quien cobra como secretario de turismo. Intrigosos que son, periodistas llegaron temprano a la cuarta edición, la de clausura, de las festividades del Lunes del Cerro. Notaron con curiosidad mochilas o morrales rojos del Banco Santander que colmaban los lugares de privilegio, frente al escenario.

Alguien recordó la queja de una turista la semana pasada de que solo tarjetas de ese banco podrían comprar dichos boletos. Sin embargo, parecían apartados a un grupo cercano a 50 personas. ¿Esos boletos fueron adquiridos por el patrocinador? ¿Bajo qué mecanismos y por qué el privilegio? Recordemos que la Guelaguetza se realiza con recursos públicos, que las delegaciones no cobran un peso partido por la mitad, que muchos ni siquiera reciben apoyos para el viaje, estancia o alimentación.

¿Por qué, entonces lugares de privilegio a una marca, un establecimiento o un negocio. ¿Quién los otorgó, a qué costo y a cambio de qué? Una festividad “democrática”, en los hechos, se privatiza.

 

DINAMITAN LOS FESTEJOS

Afanosamente ayer representantes de la Sonora Dinamita, programada para una presentación hoy dentro de las festividades de Guelaguetza buscaban a integrantes del Comité Organizador para desmentir la presencia de ese grupo en Oaxaca.

En un mensaje la Dinamita indicó “se trata de una agrupación apócrifa que engañó al Comité Organizador de la Guelaguetza 2022, haciéndose pasar por la Sonora Dinamita con la finalidad de presentarse el 2 de agosto en este evento. Sin embargo, dicho conjunto no tiene nada que ver con nosotros”. Además de denunciar a un tal Martín Flores que se hace pasar como su representante. Y comparten la página oficial de la Guelaguetza, donde aparece “la falsa publicidad”.