El estado en tiempos de Covid-19
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El estado en tiempos de Covid-19

 


El Estado moderno se fundó a partir de procesos de colonización, expansión y definición de fronteras. La promesa de seguridad mínima ante otros grupos, así como la imposición de un sistema de reglas que, en teoría, todos siguen y hay consecuencias sancionatorias en caso de no ser acatadas. Como fue evolucionando el Estado, las obligaciones a su cargo se han multiplicado al tiempo que ha concentrado mayores capacidades de control y ejercicio de uso de la fuerza.

Un Estado fuerte, y evaluado desde la perspectiva de los derechos humanos, implicaría hoy que se cuenta con un régimen democrático, en el que se busca la máxima protección de las personas y colectivos, con instituciones fuertes que velan por el mantenimiento del Estado de Derecho en todo su territorio (justo o injusto este marco jurídico, es otra historia) y que el Estado presta apoyos a su población para su desarrollo integral.

Hoy, ese Estado soñado por algunos es una utopía de lejana o imposible existencia en nuestro país.

Recién el viernes, la policía de Jalisco retuvo y agredió físicamente, de forma ilegal y sin registro a una serie de jóvenes que se manifestaban por la muerte de Giovanni López, quien fue asesinado por la policía municipal por no portar cubrebocas (https://bit.ly/2A8ldUA ; https://bit.ly/2Ab8U9X; https://bit.ly/3cDdwD1). Estas historias, que sucedieron en estos días en Jalisco, no son ajenas al contexto nacional.

Por otra parte, la escalada de contagios y decesos a causa del Covid-19, ha colocado en el límite a los servicios de salud, y con ellos a miles de familias en el país. La endeble infraestructura de salud es solo resultado de malas decisiones de gobierno tras gobierno que han priorizado elementos superficiales y que han debilitado las capacidades de respuesta de las poblaciones ante situaciones de emergencia como la que hoy enfrentamos (https://bit.ly/2BFIZI0; https://bit.ly/2XC1mWE).

Ante la debacle económica que ha traído consigo el coronavirus, también han existido el abandono de los sectores productivos. Sin políticas fiscales o de apoyo extraordinario por huir a la contratación de deuda, se pide a los pocos mexicanos que cuentan con una Afore a empeñar su futuro y endeudarse con los recursos destinados para su retiro (https://bit.ly/2BIMPjL; https://bit.ly/30h4NE2).

Aún peor, es Estado, con miras a un proyecto vacío de austeridad, ha determinado el desmantelamiento de las instituciones que lo componen sin contar con un proyecto de reforzamiento o redireccionamiento que no afecte la tutela de los bienes y derechos a su cargo (https://bit.ly/3dEkRnj).

Hace poco, cuando un pequeño sector de la población se movilizó en sus vehículos en contra del gobierno federal, acusando políticas socialistas. ¡Ojalá fuera el caso! El Estado se encuentra más debilitado que nunca. Para bien o para mal. Esto lo único que nos obliga es a reforzar los lazos comunitarios y más que nunca, unirnos ante la adversidad.

@GalateaSwanson