La devoción hacia las vírgenes de Juquila y Guadalupe une a cientos de fieles que, año con año, emprenden largos recorridos desde diferentes estados del país, incluso, algunos provienen del extranjero, para agradecer milagros, solicitar por la salud o resolver problemas personales y familiares.
En el caso de la Virgen de Juquila, esta semana más de 80 peregrinos salieron desde Altepeji, Puebla, con dirección a Santa Catarina Juquila. Este recorrido, que ya celebra 10 años de tradición, consiste en cuatro días de esfuerzo en bicicleta o corriendo con una antorcha en mano.
“Cada peregrino trae su propia petición a la Virgencita: salud, empleo o apoyo en tiempos difíciles. Incluso personas que antes no creían, ahora participan con gran fe”, comentó Isaías Pablo, organizador de esta peregrinación.
Los fieles financian su viaje con recursos propios, donaciones o el apoyo de padrinos, sorteando adversidades en el camino. Algunos peregrinos compartieron que en ciertas comunidades han enfrentado rechazos, siendo obligados a descansar en condiciones precarias, sin luz, agua o servicios básicos. “Pero también hay lugares donde nos reciben con mucha generosidad, nos regalan agua, café y comida”, añadieron.
Confiando en la protección de la Virgen de Juquila, los peregrinos planean regresar el próximo año para la edición número 11 de este recorrido, que culmina en el santuario ubicado en la región Costa de Oaxaca. La festividad se celebra cada 8 de diciembre, reuniendo a miles de devotos en la localidad.
La Morenita de Guadalupe recibe a sus fieles en Oaxaca
Mientras tanto, la Virgen de Guadalupe también comienza a recibir a sus peregrinos en el templo ubicado a un costado del Paseo Juárez El Llano, en Oaxaca de Juárez.
Desde diferentes estados, los fieles llegan caminando, en caravana o portando antorchas como símbolo de esperanza.
Rodolfo, líder del grupo Los Hijos de la Morenita, originario de Bochil, Chiapas, relató que tras 24 horas de recorrido llegaron a la capital.
“Todos traemos una promesa. Venimos con fe, sabiendo que la virgencita hará el milagro”, expresó.
La peregrinación de este grupo lleva 26 años realizándose, alternando entre la iglesia de El Llano y la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México. Pese a los riesgos de inseguridad en las carreteras, especialmente en la zona de La Ventosa, los peregrinos avanzan con relevos diurnos y mayor precaución por las noches.
La celebración en honor a la Virgen de Guadalupe culminará el próximo 12 de diciembre con una misa y bendición de imágenes en la explanada del templo, donde también se disfrutará de una tradicional verbena popular con comida, música y artesanías.
Estas peregrinaciones, llenas de sacrificio y esperanza, reflejan la fuerza de la fe que sigue uniendo a comunidades de todo el país.