Desde hace varios años, la entidad oaxaqueña arrastra un déficit de más de 2 mil médicos y especialistas, que deben enfrentarse al incremento de enfermedades como la diabetes, enfermedades del corazón e hipertensión arterial.
Padecimientos que se generan por la obesidad y sobrepeso de los oaxaqueños, sobre todo en zonas urbanas, los cuales no solo representan discapacidad en los oaxaqueños, sino también miles de muertes al año.
Al déficit de médicos y especialistas en el Estado se suma que la mayoría se resiste a acudir a zonas de alta marginación, donde los habitantes suelen ser atendidos por enfermeras y estudiantes de Medicina que realizan su servicio social.
En la entidad, la licenciatura en Medicina ocupa el sexto lugar de las carreras más solicitadas en el Estado, con mayor demanda en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) y al menos dos universidades privadas.
Hasta este año, se estima que en Oaxaca al menos 7 mil médicos están ocupados, de los cuales, el 41.1% son mujeres, con un ingreso promedio mensual de 13 mil pesos.
La mayoría de los médicos, de acuerdo a las autoridades de salud, desempeñan funciones tanto en las unidades médicas del sector público como en el sector privado.
Ante esta necesidad de médicos, de manera reciente el director de la Facultad de Medicina y Cirugía de la UABJO, Luis Manuel Sánchez Navarro, propuso la creación de una extensión de esta unidad académica en el Istmo de Tehuantepec, en beneficio de Salina Cruz y Juchitán de Zaragoza, donde se tienen campos clínicos y hospitales.
En su momento, el director confió en la sensibilidad de las autoridades del Gobierno del Estado para poner en marcha esta iniciativa, la cual cuenta con un plan de trabajo y busca la formación de más profesionistas en el área médica.
