El precio de la tortilla de máquina se ha visto afectado principalmente por las alzas constantes en los costos de los insumos, dado que en algunos sitios el kilogramo alcanza los 22 pesos.
De acuerdo con el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), los costos de producción de la tortilla de maíz y su precio final reportan una tendencia al alza, pues tan solo al mes de julio registró una inflación anual del 11.53% con una variación mensual del 1.57%.
Y la inflación acumulada del 2022, en las tortillas de maíz, es de 11.18%, reportó el índice del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Tan solo en algunas tortillerías de la capital del estado, el precio por kilogramo del alimento básico en las mesas de los oaxaqueños alcanza los 22 pesos, y si las envuelven en papel, el precio final es de 23 pesos.
No obstante, en algunos expendios ubicados en la periferia y en los límites con Santa Lucía del Camino el precio por kilogramo del alimento ronda los 21 pesos, así como en Santa Cruz Xoxocotlán en algunos negocios el kilo todavía se vende en 20 pesos.
En opinión de los comerciantes, la venta se mantiene de forma constante, al ser un producto de primera necesidad, pero los altos precios en la producción les reduce márgenes de ganancia.
Con los precios actuales de la tortilla esto ya no es un negocio redituable, dado que las ganancias se han reducido considerablemente, pero tampoco podemos cerrar e irnos, tenemos que aguantar”, indica Sandra, encargada de la tortillería “Malenita”, ubicada en la zona centro.
Aún y cuando evita dar detalles de compras y precios exactos de sus insumos, estima que los costos de producción de las tortillerías se han elevado en promedio 20%, lo cual les impacta.
Tenemos un alza en los insumos, desde harina de maíz, papel, energía eléctrica, renta de local y trabajadores, hoy en día tener un comercio es todo un desafío diario por mantenerlo, admite.
La víspera, la Procuraduría Federal del Consumidor acusó a la empresa Maseca de influir negativamente en el precio de las tortillas, dado que no baja sus precios y obliga a las tortillerías a trasladar el costo final a los consumidores.
La Profeco sostuvo que es un fenómeno que debe atender la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), pues aún y cuando el precio del maíz ha ido a la baja, Maseca sólo lo ha subido los precios.
