Con dos nuevos casos de paludismo y un acumulado de seis en lo que va de este 2024, el estado de Oaxaca se mantiene como la segunda entidad con el mayor número de casos, apenas por debajo de Chiapas con siete.
En el país, solo cuatro estados han notificado casos de paludismo Vivax en lo que va del año, como Campeche (1), Chihuahua (2), Chiapas (7) y Oaxaca (6). Del total (16), nueve han sido en hombres y siete en mujeres.
Hasta la misma semana epidemiológica 10, pero de 2023, Oaxaca no reportaba un solo caso de paludismo, manteniéndose libre de la enfermedad que resurgió en la entidad en 2022, a casi 10 años de estar libre de este padecimiento.
Los registros de la Secretaría de Salud federal señalan que el estado concluyó 2022 con un total de 17 casos de paludismo y tres en 2023, sobre todo en municipios de la jurisdicción sanitaria del Istmo de Tehuantepec.
Las autoridades del sector salud llamaron a la población a prevenir el paludismo con el uso de repelente, la colocación de mosquiteros en puertas y ventanas y vestir ropa con manga larga y pantalón.
Al señalar que la participación comunitaria es esencial, recordaron que los parásitos que causan el paludismo maduran en el hígado y de ahí pasan al torrente sanguíneo, donde infectan los glóbulos rojos.
Al igual que la presencia del dengue en la entidad, se prevé que este año también aumenten los casos de paludismo a diferencia del año anterior, sobre todo en las regiones de Valles Centrales y el Istmo de Tehuantepec.
Ambas enfermedades se transmiten por la picadura de un zancudo infectado y por ello es necesaria la prevención en las viviendas, así como la colaboración de vecinos en la constante limpieza de las calles y áreas verdes.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), los síntomas del paludismo pueden ser leves o potencialmente letales, donde los síntomas pueden ser fiebre, escalofríos y dolor de cabeza, así como fatiga, confusión o convulsiones.
