La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) inició el martes un protocolo de atención y vigilancia con enfoque de derechos en el Centro de Reinserción Social de Tanivet, Tlacolula, con apoyo de un equipo multidisciplinario.
La acción del organismo estatal se realizó ante la amenaza de una huelga de hambre por 400 personas privadas de su libertad, como medida de protesta por diversos hechos que atentan contra sus garantías.
Personal de la Defensoría expuso además que desde el lunes el órgano autónomo dictó medidas cautelares a la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO), para garantizar la integridad física de las personas que se encuentran privadas de su libertad en dicho centro.
Abrió el expediente DDHPO/0276/(24)/OAX/2020 y requirió un informe a la Secretaría de Seguridad Pública, para conocer los motivos que generaron la inconformidad.
El órgano autónomo encabezado por Bernardo Rodríguez Alamilla, reiteró su compromiso de vigilar que a las personas privadas de la libertad les sean respetados los derechos humanos que no le fueron transgredidos por la sentencia, y sin los cuales no puede llevarse a cabo un verdadero proceso de reinserción social.
Recordó que las personas privadas de la libertad deben gozar de los derechos a la vida, la dignidad, la integridad física, psíquica y moral, así como la igualdad de trato. Así también, a la defensa, a no ser discriminadas, a la salud, al trabajo, así como a la educación y recreación, entre otros.
La DDHPO resaltó que de manera permanente personal de la Defensoría Especializada en Centros de Reclusión lleva a acabo visitas a los Centros de Reinserción Social de Oaxaca, además de atender quejas de familiares de personas privadas de su libertad.
