Como parte del programa de actualización jurídica que impulsa el Poder Judicial del Estado, el juez de Distrito adscrito al Centro de Justicia Penal Federal de Querétaro, Eduardo Alberto Osorio Rosado, impartió una jornada de capacitación con los temas “Prisión Preventiva Oficiosa. El papel de las personas juzgadores frente a la sentencia del caso García Rodríguez y Reyes Alpízar” y “Valoración de la prueba conforme a la teoría de la sana crítica”.
Al dar la bienvenida al reconocido jurista, especialista en el Sistema de Justicia Penal Acusatorio y con estudios en Derecho Constitucional y Amparo, el presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura, señaló que en la medida que las instituciones cuenten con operadores jurisdiccionales con el potencial profesional que se requiere en los nuevos paradigmas, se sentarán las bases de un sistema de justicia más humano, pero sobre todo más justo.
Acompañado de los magistrados Arturo León de la Vega y Gerardo Carmona Castillo, pioneros en Oaxaca del modelo basado en los juicios orales; y del magistrado Moisés Molina Reyes, señaló que la prisión preventiva oficiosa es una figura que provoca debate y controversia en nuestro país, además de que plantea serias interrogantes sobre el respeto al principio de presunción de inocencia, uno de los pilares fundamentales del sistema judicial.
Mantener a personas en prisión antes de su condena genera condiciones de hacinamiento, violencia y violación a derechos básicos en contra de principios de reinserción y resocialización fundamentales en un estado constitucional de Derecho. La prisión preventiva debe ser considerada como una medida extraordinaria aplicada cuando no existan alternativas razonables o medidas menos restrictivas para garantizar la comparecencia del acusado”, indicó.
Aunado a ello, agregó, aplicar la teoría de la sana crítica implica que el juez se aparte de cualquier prejuicio o sesgo personal para fundar sus decisiones en la lógica, la razón y los hechos presentados, donde es esencial que se valore cada prueba de manera individual y en relación con el conjunto de la evidencia evitando influencias externas o suposiciones infundadas.
Durante su intervención en la jornada, en la que participaron magistradas, magistrados, consejeros de la judicatura, jueces locales y federales, así como estudiantes, el doctor Osorio Rosado compartió sus experiencias y reflexiones en torno a ambos temas.