Madres y padres de familia del Colegio Francoise Dolto pidieron el apoyo de la ciudadanía para la pronta localización de los responsables de las quemaduras que sufrieron varias niñas y niños por el mal manejo de una fogata.
Luego de que la Fiscalía General de Oaxaca emitiera la noche del martes las fichas de búsqueda de la directora del Colegio Ariela Sánchez y el profesor de educación física, Jonathan Islas, como presuntos responsables de la tragedia en este Colegio, varias madres y padres de familia pidieron la colaboración de las y los oaxaqueños.
Aunque la hermana e hija de la directora fueron puestas a disposición de las autoridades hace unas semanas, tanto la directora como el profesor de educación física se encuentran prófugos, luego de que la primera fuera acusada de alterar la escena donde sucedieron los hechos y el segundo de generar las quemaduras por manipular un bote de alcohol en la fogata.
En conferencia de prensa, las madres y padres de las niñas y niños que sufrieron quemaduras en segundo grado, lamentaron que a más de un mes de esta tragedia del 29 de abril, las autoridades del Colegio no hayan asumido la responsabilidad de dar la cara ante las heridas psicológicas y físicas de los menores.
Victoria, mamá de Kasumi, la menor de cuatro años con mayor gravedad e internada en un hospital de Galveston, Texas, afirmó que su hija ya se encuentra estable pero en vigilancia por la gravedad de sus heridas.
Mientras, Luis Armado, papá de Kinich, otra de las menores que tuvo quemaduras de gravedad, señaló que las madres y padres de las víctimas han asumido los gastos en medicamentos, tratamientos e intervenciones quirúrgicas, ante la falta de responsabilidad de los directivos.
Aunque Kinich había sido trasladada al Hospital de la Niñez Oaxaqueña, la madre y padre de la menor decidieron retirarla del nosocomio para llevarla a un hospital privado, donde han gastado miles de pesos en pomadas y tratamientos.
Varias madres de familia señalaron el calvario de este proceso por el daño que les fue provocado a sus hijas e hijos, lo cual ha dejado en evidencia una serie de irregularidades no solo en la forma de operar del Colegio, sino también de las autoridades educativas y de impartición de justicia.