Pese a declarar nulos avances en las mesas de negociación con el Gobierno federal, en la búsqueda de solución a su pliego de demandas, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) daría concluida este viernes su jornada de lucha para regresar a clases este lunes.
A 22 días de iniciar un plantón en el Zócalo de la Ciudad de México y un paro indefinido de labores en miles de escuelas de educación básica, el organismo sindical nacional analizaba hasta el cierre de esta edición su retiro de la capital del país por mayoría de votos.
Aunque la Asamblea estatal de la Sección 22 del magisterio oaxaqueño decidió regresar a las aulas este lunes en las más de 11 mil escuelas públicas, la Asamblea Nacional Representativa de la CNTE consultó también con el resto de las secciones de otros estados durante la noche de este jueves.
Integrantes de la Sección 22 apostaron por la reanudación de labores en beneficio de más de 800 mil estudiantes, al percibir el retorno de miles de profesores a sus comunidades desde la semana pasada.
Por esta disminución de sindicalizados en el plantón de la Ciudad de México, la CNTE consideró importante dar por concluido la protesta nacional, no sin antes definir nuevas modalidades de movilización, ya fuese rotativa por región o representativa.
Sería este viernes cuando las y los trabajadores de la educación retiren sus campamentos del Zócalo de la Ciudad de México, pese a no lograr la abrogación de la Ley del ISSSTE 2007 ni de la Reforma educativa Peña-AMLO.
Mientras, este jueves, integrantes del movimiento nacional magisterial irrumpieron este jueves en la sede del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), donde vandalizaron las instalaciones y quemaron varios objetos en el interior.
En lo que sería una protesta y bloqueo en las instalaciones de la oposición sindical, se convirtió en actos violentos con el uso de fuego y destrozos con palos y mazos, en rechazo a la dirigencia del SNTE.