Los incendios forestales es uno de los factores que más ha impactado a las regiones del Istmo de Tehuantepec, Mixteca y Valles Centrales en cada temporada, coincidieron ambientalistas en Oaxaca.
De acuerdo con la Comisión Nacional Forestal (Conafor), el 17.91% de los incendios forestales registrados fueron provocados por quemas agropecuarias no controladas, lo que pone en riesgo la vida de los productores, daña los ecosistemas y degrada los suelos.
Tan solo el 2024, el estado de Oaxaca acumuló 270 conflagraciones forestales con afectación en 160 mil 415 hectáreas, lo que lo ubicó en el décimo sitio a nivel nacional en materia de número de conflagraciones y el tercer lugar en cuanto a mayor número de hectáreas afectadas por el fuego.
No obstante, la temporada de incendios fue más agresiva que el año pasado, ya que aumentó en un 35.15% en lo relacionado con el número de conflagraciones, pero relacionado con el número de hectáreas siniestradas por el fuego el incremento fue del 76.32%.
Y las consecuencias de la desertificación y la sequía en el estado de Oaxaca es la pérdida anual promedio de unas 18 mil 757 hectáreas de zona boscosa.
A lo largo de 18 años, el organismo federal documentó una devastación en el estado de al menos 337 mil 622 hectáreas, de los cuales el 67% es originado por el cambio de selva a pradera.
Pero también ha identificado otro de los factores, como lo es el cambio de selvas a tierras agrícolas, con el 31% y que representa 106 mil 132 hectáreas las afectadas y un tercer punto afecta al 1%, que corresponde al cambio de selva a otro tipo de tierras con fin de desarrollo urbano.
Para la Conafor durante el estiaje, (de enero a junio) es cuando hay el menor nivel de agua en las lagunas o ríos, en consecuencia, se presenta el mayor número de incendios forestales en el país y Oaxaca no es la excepción.
Ante esta situación, promueven alternativas al uso de fuego para evitar la quema de parcelas, aunque son una práctica ancestral para preparar suelos de cultivo, aumentan el riesgo de incendios forestales y ocasionan severos daños a la biodiversidad.
La federación dice que en 64 ayuntamientos se tiene una atención prioritaria porque allí ocurren el 46% de los siniestros y a su vez, afectan a 53% de la superficie por quemas agropecuarias.
Los municipios que requieren de atención prioritaria se ubican en Baja California, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Durango, Guerrero, Hidalgo, Jalisco y Estado de México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, San Luis Potosí, Tamaulipas, Tlaxcala y Veracruz.
Por la sequedad extrema en las zonas forestales, autoridades exhortaron a los hombres y mujeres del campo a evitar el uso del fuego para la limpieza de sus terrenos, ya que se han generado demasiados incendios en la temporada 2024.
De acuerdo con el Sistema de Predicción de Peligro de Incendios Forestales de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), la sequedad en el combustible es muy alta, lo cual desencadena incendios difíciles de controlar.
E invitó a la población a evitar el uso del fuego en el campo, ya que es uno de los varios factores que generan las conflagraciones en las zonas forestales.