La organización Front Line Defenders urgió a las autoridades mexicanas a tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad e integridad física y psicológica de los integrantes de la UCIZONI, quienes se oponen a obras del Corredor Interoceánico.
A través de una misiva, expresó su preocupación por los ataques y estigmatización de la organización, ya que se presume que están vinculados a su legítima actividad en defensa de los derechos humanos y ambientales.
De igual manera, alertó por el clima de impunidad y desprotección de los defensores de derechos humanos en México, así como por el impacto negativo que estos ataques y estigmatización de la protesta tiene en los derechos de los pueblos indígenas, en particular en su derecho fundamental a la consulta previa, libre e informada.
Y solicitó a las autoridades mexicanas que inicien una investigación inmediata, exhaustiva e imparcial sobre los ataques ocurridos el pasado 24 de marzo de 2023, con el fin de identificar a los responsables, llevarlos ante un tribunal competente e imparcial, y aplicarles las sanciones previstas por la ley.
Pidió asumir las medidas necesarias para poner fin a las intimidaciones contra los defensores y defensoras de los derechos humanos en México, para que puedan seguir con sus actividades de defensa de los derechos humanos sin temor a represalias.
También requirió tomar las medidas necesarias para asegurarse que los funcionarios públicos y otras figuras públicas se abstengan de hacer declaraciones que estigmaticen la legítima labor que realizan las personas defensoras de derechos humanos.
Incluso recordó que, en la madrugada del 24 de marzo de 2023, un plantón de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo fue atacado por civiles y policías del Estado de Oaxaca, dejando un saldo de dos personas heridas.
Expuso que la UCIZONI es una organización indígena con más de 37 años de experiencia en la defensa de los derechos humanos de los pueblos indígenas en México, también ha trabajado solidariamente por otras luchas indígenas en el continente americano, siendo uno de los pilares de su trabajo, liderado por la comunidad indígena la resistencia a la implementación de megaproyectos sobre sus territorios.
Aunado a que han denunciado y movilizando en contra de abusos e impactos negativos resultantes de las obras de modernización del ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca.
El proyecto del Corredor Interoceánico incluye el eventual desarrollo de un corredor comercial-industrial, la construcción de puertos comerciales, una red de carreteras primarias y secundarias, redes de conectividad digital, un gasoducto, así como diez parques industriales.
Desde su óptica, las obras plantean un riesgo para las formas de vida de las 12 comunidades indígenas que habitan en la zona, así como para la preservación de su territorio y medio ambiente.
El Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) ha registrado 26 agresiones en contra de defensores de derechos indígenas entre octubre del 2021 y marzo del 2023, en el marco de la construcción del Tren Interoceánico.
