Un edificio histórico rodeado de tablones de pino a manera de protección (la catedral en remodelación tras ser vandalizada, pero el espectador no lo sabe). Una explanada donde es posible ver un músico con un instrumento que parece ser un saxofón ¿tocará ahí, qué tipo de música? Globeros, un puesto de periódico, el sitio de taxis.
Es la esquina de Independencia y García Vigil. Es la imagen que muestra Google Street View en uno de los recorridos realizado por la ciudad. Nos retrasamos unos metros y se observa que, en la base de edificios históricos de cantera verde hay muros vandalizados, otros más con gruesos brochazos que intentan encubrir grafitis, puestos de ambulantes, de información turística; hombres y mujeres caminando, los oaxaqueños y su vida cotidiana.
En la desembocadura de García Vigil, un gris macetón redondo marca el fin de la calle. Dos vehículos vulneran el espacio presuntamente destinado al aparcamiento para discapacitados, ninguno de los autos muestra tarjetón o placas especiales para ocupar dicho lugar.
Junto a ellos ¡a media calle! pintada en el piso una presunta bicicleta. El visitante cibernético seguramente desconoce que ello es indicativo de una ¿ciclovía? ¡a mitad de calle! La ciudad sin elemento para proteger al ciclista, ningún ciclista.
Por las imágenes son entre las 10 y 10:00 horas de una mañana cualquiera, de un día hábil; un taxi invade el paso peatonal, “las cebras” que en otra latitud, otro país sería espacio inviolable destinado para peatones que, como lo capta Google Street View, deben ir toreando al vehículo.
Esto esta es la estampa de un segundo, de un instante que la aplicación Google Street View muestra al mundo; la ventana digital para que otros ojos, en otros continentes conozcan un poco de la vida cotidiana de Oaxaca.
GOOGLE STREET VIEW, TELETRANSPORTACIÓN
Es el sitio digital del diario estadounidense The New York Times. Con una pregunta ¿quién maneja el auto de Google Street View? Despierta el interés del lector y puntualiza “Joe McCallen, de 63 años ha cartografiado 160 mil km de carreteras para el mapa inmersivo de Google”
El hombre con el inusual trabajo “conduce desde casi el amanecer hasta justo antes del anochecer, mientras las cámaras del techo toman fotos que se empalman para formar imágenes panorámicas. Gracias a él y a otros innumerables conductores, cualquier persona del mundo puede conectarse a Google Maps y recorrer de manera virtual 19 millones de kilómetros de carreteras en 110 países. Es lo más cercano que tenemos los humanos a la teletransportación”
Y sin duda ese hombre y su Honda HR-V tuneado, auto equipado con una torreta de 3 metros en el techo, una pantalla personalizada que cubría la consola central y un asiento trasero lleno de computadoras ha estado una o varias veces en Oaxaca y documentado un día, una tarde en la vida de la entidad.
Pero ¿qué ha visto en Oaxaca? en sus recorridos ¿Qué filma y le enseña al mundo a través de la ventana digital? Elijamos otro punto, al azar.
Y ahora el crucero de Niños Héroes y el bulevar Eduardo Vasconcelos con la desembocadura de la avenida Heroico Colegio Militar. ¡No hay peatones! Solo autos, una vuelta inglesa; el tránsito regulado por semáforos, una vuelta inglesa y una construcción mayor. Los oaxaqueños sabemos que es el estado de los Guerreros de Oaxaca. En una de las esquinas, cómo estaba el predio donde hoy hay una gasolinería.
De acuerdo al diario neoyorkino, Street View se ha enfrentado a problemas de privacidad. En los primeros año los peatones que se topaban con el vehículo le tomaban fotografías, saludaron con la mano, señalaron con el dedo o asintieron al coche como si acabaran de ver a una celebridad menor; pero también captó señales obscenas.
Es otro punto de la ciudad: el crucero de 5 Señores. La imagen de un árbol talado. Un paso a desnivel con los muros grafiteados; los negocios invaden la acera y colocan sus anuncios. Un feo puente elevado. ¡Justicia para Tomás Martínez! Se lee en un muro del paso deprimido. Los muros presas de la humedad, descarapelados.
Estamos ahora sobre el andador turístico: sombrillas sucias, semicaídas, desgastadas y quemadas por el sol. Son los inevitables ambulantes y, la plaza del Carmen Alto tomada por el tianguis “artesanal”.
Son parte de las estampas que se pueden ver de Oaxaca a través de los ojos digitales.
The New York Times indica que el nuevo y elegante modelo de cámara de Google permitirá que cualquier auto con portaequipajes se convierta en un auto Street View; desde hace tiempo la Inteligencia Artificial ayuda a difuminar caras, matrículas y direcciones en la plataforma.
¿Qué otro rostro ofrecerá Oaxaca al mundo en los próximos años?