En la homilía del domingo desde la catedral, el presbítero Alejandro Rodríguez, en representación del arzobispo Pedro Vázquez Villalobos, llamó a los fieles a reflexionar profundamente sobre sus vidas y a reenfocar su atención en lo esencial: el alma, el corazón y la búsqueda de Dios.
“El que seguimos no es una idea, sino una persona. Nos ponen siete nombres de personajes históricos para decirnos que, en este tiempo determinado de la historia, apareció este hombre anunciando la venida del Mesías”, destacó Rodríguez, subrayando la centralidad de Jesucristo en la fe cristiana.
El presbítero hizo un llamado a identificar y enfrentar las codependencias que, según sus palabras, “envenenan el alma y el corazón”. Reconoció que en la actualidad muchos enfrentan nuevas formas de ataduras, incluidas las que se gestan a través de la tecnología, señalando: “Hoy las modernas codependencias están simple y sencillamente en nuestras manos; apagarlo sería prácticamente apagarnos el aire”.
En este segundo domingo de Adviento, invitó a los presentes a evaluar el camino que están transitando en sus vidas. “¿El camino que estás recorriendo está más cercano a Dios? ¿O muchas veces nos vamos desviando y tomando veredas?”, cuestionó, exhortando a los fieles a preparar sus corazones para recibir a Cristo.
En un mensaje cargado de esperanza y fe, el presbítero recordó las palabras de Jesús: “Yo soy el camino, la verdad y la vida”. Reiteró que la creencia cristiana no se basa en una ideología ni filosofía, sino en una persona divina: el Hijo de Dios.
“Dile hoy al Señor que te ayude a transitar por donde Él ha transitado. Él ya caminó y va delante de nosotros. Revisa tu camino, ¿está cada vez más cercano a Dios? Cuando digo Dios, hablo de paz, felicidad, alegría y convivencia”, concluyó Rodríguez.