Padres, madres de familia y personal docente del Centro de Iniciación Musical de Oaxaca (CIMO) protestaron en el edificio que se localiza en la calle de Crespo por las deficiencias en infraestructura, pero también los salarios raquíticos y lo último, el hostigamiento administrativo.
Pero es más, una de las madres de familia, Citlalli Toledo Sánchez indicó que el alumnado que permanece unos 9 años en la formación musical, reciben sus instrucción en un ambiente insalubre porque las instalaciones carecen de lo necesario.
Los padres y madres, pidieron que el gobernador Salomón Jara Cruz y demás autoridades competentes acudan a las instalaciones y se revise la situación de la infraestructura, además de que se instale una mesa de atención para atender los planteamientos.
Mientras tanto, quisieron dar un recorrido con la prensa en las instalaciones, hecho que el personal del CIMO frenó.
Una de las inconformes, indicó que a 34 años formando generaciones de niñas y niños en la música y aportando activamente al legado cultural de Oaxaca, está en una crisis que el gobierno estatal por medio de la Secretaría de Cultura, deberá atender.
Sin embargo, desde hace varios años permanece esta situación crítica en sus áreas administrativa, financiera y de mantenimiento.
Ante esto, de manera interna se constituyeron de manera legal y oficialmente como Comité de Padres de Familia, para levantar la voz e iniciar una serie de acciones para lograr la legitimidad, reconocimiento y legalidad de este centro de formación musical.
Las clases que se imparten a los niños y niñas son bajo condiciones no dignas, teniendo que suspender actividades constantemente ante lo insalubre que se convierte asistir a las instalaciones debido a la falta de agua, incluso para los baños, las goteras en los salones y la falta de mantenimiento a los instrumentos, así como otros insumos básicos necesarios y primordiales para que nuestros hijos sigan aprendiendo en un ambiente sano”, dijo.
Y respaldó la exigencia del profesorado a que incremente su salario, ya que apenas les pagan por hora de enseñanza la cantidad de 53.40 pesos, menos una retención “injustificada” por un concepto de “honorarios asimilables a salario”, quedando en aproximadamente 47 pesos.
Mientras tanto, el 24 de mayo la Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca (SECULTA), convocó a la profesora y fueron amenazados por la contadora Ana Llaveros acompañada por José Cruz Medina López y Feliciano Marín Valdivieso, quienes les dijeron que “no podían percibir un sueldo doble”, porque además de dar clases en el CIMO, forman parte de la Orquesta Sinfónica de Oaxaca o a la Orquesta Primavera de Oaxaca o la Banda de Música del Estado de Oaxaca.
Con esto, 13 profesores son los que estarían dando de baja, lo que representa el 50% de la plantilla docente:
situación que no permitiremos porque ignoramos a quienes pretenden contratar, bajo qué perfiles y con qué intención ya que como se imaginarán nadie quiere venir a trabajar por 47 pesos y tampoco estamos dispuestos como padres de familia en dejar a nuestros hijos en manos de gente extraña y que no tenga la formación o experiencia necesaria”, añadieron.
Además pidieron que les den documentos con validez a los 150 estudiantes que van desde los 6 a los 18 años porque no los reconocen otras instituciones.
