Derivado del alza imparable en los precios de los combustibles, el uso de las motocicletas ha aumentado considerablemente en la ciudad y la entidad, explica el maestro mecánico, Marcos Sánchez.
A lo largo de 15 años se ha dedicado a la reparación de motos, pero ahora es diferente relata, la tecnología evoluciona cada día y la clientela también ha aumentado.
Ubicado sobre la calle de Manuel Ávila Camacho, Marcos abre su local desde las ocho de la mañana en espera de los clientes, quienes en su gran mayoría acuden a solicitar el servicio de la unidad.
La playera azul un tanto descolorida por el sol y la grasa dan cuenta de las intensas jornadas laborales en un espacio que no va más allá de los 10 metros cuadrados.
Son casi las 11 de la mañana y el maestro ya desarmó el motor de una motoneta debido a que el cliente la encargó para antes del fin de semana.
A contrarreloj avanza con la limpieza de la pieza vital para el funcionamiento del vehículo, aunque cuenta con un ayudante, prefiere hacer el trabajo que requiere mayor experiencia.
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Encarecen refacciones
Dice que ante el encarecimiento de las refacciones, los propietarios han optado en las motonetas incorporar refacciones no tan caras y le sugieren que le meta algunas de origen chino.
Sin embargo, también hay quien pide las piezas originales y es cuando el costo se eleva.
Aquí le hablamos con la verdad al cliente, quieres calidad es tanto, quieres que funcione nada más cuesta esto, en el taller JM no engañamos a nadie, trabajamos bien y eso nos lo agradece la clientela”, explica.
Entrevistado mientras realiza su trabajo en el taller que atiende desde temprana hora, relata que en ese trabajo no hay horarios definidos, pues depende de la demanda que tenga en el día.
Incluso admite que desde hace unos dos años, el uso de la motocicleta comenzó a masificarse, principalmente por la irrupción de las aplicaciones de entrega de comida a domicilio y la pandemia de Covid-19.
Los servicios preventivos son los que más nos llegan y son los amigos repartidores o empleados quienes han optado por motonetas y motos de cilindrada no mayor a los 150 centímetros, cierra la charla mientras acude a recibir otra unidad de motor.
