Ante la protesta de empleados municipales adherido al Sindicato Independiente 3 de Marzo y por la crisis sanitaria, el municipio señaló que aunque se tiene un terreno que podrá usarse en un mes, se buscan soluciones emergentes al problema de la basura.
Se esperaba obtener estas soluciones emergentes durante la noche del sábado y este domingo, luego de la crisis que explotó nuevamente con la protesta de sindicalizados por el colapso del tiradero temporal (el cuartel inconcluso que ya tiene más de 1, 600 toneladas de residuos) y la falta de un nuevo sitio provisional.
El viernes, algunos regidores y el presidente municipal, Francisco Martínez Neri, reconocieron que la capital vive momentos críticos por un problema que data de hace 25 años y que explotó con el cierre del tiradero de Zaachila, al que no se buscó sustituto en pasadas administraciones.
Asimismo, apelaban a la solidaridad de la población para no agravar la crisis al abandonar sus residuos en espacios públicos.
Este sábado, durante el segundo día de protestas de los sindicalizados y a pregunta de EL IMPARCIAL, la autoridad local respondió que se buscan espacios emergentes y que incluso diversas comisiones acudían a evaluarlos. También, que el ayuntamiento pretende comprar otro predio para los residuos orgánicos (como destino final). Este se sumará al ya comprado, pero que no puede usarse sino en poco más de un mes.
A través de su dirección de comunicación social, el gobierno municipal explicó que desde el viernes se mantienen en mesa de trabajo permanente, hasta lograr las soluciones emergentes que se esperan para este fin de semana.
En tanto esto ocurre, diversas zonas de la capital se han convertido en tiraderos a cielo abierto, incluidos los parques y jardines públicos como El Llano, el Conzatti, el zócalo capitalino, los alrededores del ex convento de Santo Domingo de Guzmán, la calle de La Reforma y la colonia del mismo nombre. Así como vialidades de la agencia San Felipe del Agua, el barrio del Marquesado, Jalatlaco y la Central de Abasto.
