Pese a las constantes quejas e inconformidades en las redes sociales por el desabasto de medicamentos y altos costos en los servicios de salud, éstas no han podido llegar a las instituciones competentes por fallas en su sistema de comunicación.
Desde la puesta en marcha del nuevo Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), familiares y pacientes de distintos centros de salud mostraron su inconformidad por la falta de medicinas y el aumento de precios en servicios como consultas médicas.
Los inconformes decidieron recurrir a las redes sociales o algunos medios de comunicación para exponer las irregularidades, ante la ausencia de organismos para atender las quejas y dar solución de manera inmediata.
El Gobierno federal puso a disposición el número 800 767 8527 para atender quejas o dar información a las personas sin seguridad social, pero hasta ayer éste no funcionaba de manera correcta.
Durante la marcación, el número telefónico solo enlaza con una grabación donde se explica que las personas sin seguridad social pueden acudir a cualquier centro de salud para recibir atención, sin necesidad de un documento de afiliación.
En la grabación se expone que las personas solo pueden presentar credencial de elector, CURP o acta de nacimiento, para ser atendidos en cualquier hospital, clínica o centro de salud. Precisa que para obtener servicios gratuitos no se requiere de afiliación.
La contestadora de este número del Gobierno federal ofrece dos opciones para enlazar con algún operador, tanto para la presentación de alguna queja o para solicitar información u orientación. Sin embargo, en cualquiera de las dos opciones, la llamada se enlaza pero nadie contesta.
Por ser una problemática con el Gobierno federal, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) no representa una opción para recibir las quejas de los usuarios, que deberán acudir a los números de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para presentar alguna queja
