La reforma al Poder Judicial ha despertado no solo polémicas legales y políticas, sino también incertidumbre laboral. Una de las preguntas más frecuentes en las últimas semanas entre trabajadoras y trabajadores mexicanos es: ¿el 1º de junio, día de elecciones extraordinarias, cuenta como feriado oficial? Y si es así, ¿cómo debe pagarse a quienes laboren ese día?
Aunque la legislación aún no ha sido completamente adaptada al contexto de esta elección extraordinaria, lo cierto es que la Ley Federal del Trabajo (LFT) contempla las jornadas electorales como días de descanso obligatorio. Así lo indica el artículo 74, fracción IX, donde se estipula que “las jornadas electorales —federales o locales— se consideran feriados oficiales.”
¿Aplica para estas elecciones del Poder Judicial?
El caso del 1º de junio de 2025 es especial, ya que se trata de una elección extraordinaria —una figura inédita para seleccionar cargos del Poder Judicial—, y hasta el momento, no se ha publicado una modificación específica en la LFT para incluir formalmente este evento.
Por ello, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social ha confirmado que, aunque el día puede ser considerado de descanso, legalmente solo se garantiza el derecho a votar, no el descanso obligatorio para todos.
Esto genera una zona gris legal, en la que muchos trabajadores están sujetos a la interpretación individual de empresas o dependencias, y solo en algunos estados, como Veracruz y Durango, se ha reconocido el pago doble extra por tratarse de un día feriado.
¿Cómo deben pagarte si trabajas el domingo 1 de junio?
Para quienes laboren este domingo, el pago debe calcularse con base en tres elementos:
1. Salario diario normal.
2. Pago doble por ser feriado (solo en los estados que lo reconocen formalmente).
3. Prima dominical del 25%, en caso de que el contrato laboral incluya domingos como parte de la jornada ordinaria.
En resumen: si trabajas este domingo, tienes derecho al tiempo necesario para acudir a votar, y si se reconoce como feriado oficial en tu entidad o empresa, podrías recibir hasta triple salario por ese día.
Falta de claridad legal y riesgos de abuso laboral
La falta de una directriz clara a nivel nacional sobre el estatus del 1º de junio como feriado deja espacio para abusos y malas prácticas por parte de empleadores. Por ello, expertos en derecho laboral recomiendan documentar cualquier situación de trabajo forzoso sin pago correspondiente y acudir a instituciones como la Profedet (Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo).
La Profedet ofrece asesoría legal gratuita a trabajadores en casos de despido injustificado, falta de pago de salarios, prestaciones omitidas o acoso laboral. Además, puede representar legalmente a empleados ante juntas de conciliación y arbitraje o tribunales laborales.
Una elección histórica, pero también un reto para la legislación laboral
El proceso electoral extraordinario para elegir a integrantes del Poder Judicial es inédito, tanto por su formato como por el contexto político que lo rodea. Sin embargo, la falta de actualización legal para reconocer este tipo de elecciones como días de descanso obligatorio demuestra que la legislación laboral no ha ido al ritmo del cambio político.
Mientras figuras como Ricardo Monreal y Gerardo Fernández Noroña discuten si el presidente Andrés Manuel López Obrador podría tener algún tipo de participación en el proceso, miles de trabajadores enfrentan incertidumbre sobre sus derechos básicos este domingo.
Lo que sí puedes hacer: exigir tu derecho a votar
Más allá de cualquier ambigüedad legal, un derecho que sí está garantizado es el de participar en la jornada electoral. Los patrones están obligados a darte tiempo suficiente para acudir a votar, sin represalias ni descuentos.
Y si enfrentas alguna irregularidad, puedes recurrir a las siguientes instancias:
1. Profedet: ofrece defensa y asesoría laboral gratuita.
2. Secretaría del Trabajo y Previsión Social: canales de denuncia y orientación.
3. Tribunales laborales: para resolver conflictos mayores.
El 1º de junio es más que una elección, es una prueba para el sistema
La jornada electoral para reformar el Poder Judicial no solo será una prueba política e institucional, sino también un examen para el Estado de derecho laboral en México. Que trabajadores sigan preguntándose cuánto deben cobrar o si pueden descansar ese día, evidencia las grietas que aún persisten entre la ley y la realidad.