El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha emitido una alerta sobre una zona de baja presión en el norte de Guatemala, que presenta un 60% de probabilidad de desarrollo ciclónico en las próximas 48 horas, y un 90% en los próximos siete días. Si se concreta este desarrollo, se formará el ciclón Lane, el duodécimo de la temporada de huracanes que comenzó en junio y concluirá en noviembre.
Actualmente, la zona de baja presión se localiza a 185 kilómetros al nor-noreste de Boca de Pijijiapan, Chiapas, y se espera que su trayectoria se dirija hacia el océano Pacífico. La posible formación de Lane se suma a la lista de nombres ya establecidos para esta temporada, que incluye una serie de tormentas tropicales y huracanes pronosticados.
PRONÓSTICOS PARA LA TEMPORADA 2024
Por otra parte, para la temporada 2024, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) anticipa la formación de 23 tormentas tropicales, de las cuales se estima que 11 podrían intensificarse hasta convertirse en huracanes. Entre estos, cinco podrían alcanzar la categoría 3 o superior.
Además, los nombres previstos para los ciclones en el océano Pacífico incluyen: Aletta, Bud, Carlotta, Daniel, Emilia, Fabio, Gilma, Héctor, Ileana, John, Kristy, Lane (en desarrollo), Miriam, Norman, Olivia, Paul, Rosa, Sergio, Tara, Vicente, Willa y Xavier.
En el océano Atlántico, los nombres asignados son: Alberto, Beryl, Chris, Debby, Ernesto, Francine, Gordon, Helene, Isaac, Joyce, Kirk, Leslie, Milton, Nadine, Oscar, Patty, Rafael, Sara, Tony, Valerie y William.
PREPARATIVOS Y PRECAUCIONES
Ante la posibilidad de la formación de Lane, el SMN recomienda a la población mantenerse informada sobre el desarrollo de la situación meteorológica y seguir las recomendaciones de las autoridades locales. Es fundamental estar preparado y tomar medidas de precaución, especialmente en las áreas que podrían verse afectadas por el impacto de este fenómeno natural.
Finalmente, ante esta temporada de huracanes que todavía no concluye es importante la vigilancia constante y la preparación ante cualquier eventualidad. La comunidad debe estar alerta y lista para actuar según las directrices de seguridad.