De acuerdo con la RAE, el “gato” es un mamífero de la familia de los félidos, digitígrado, doméstico, de unos 50 cm de largo desde la cabeza hasta la base de la cola, con una lengua muy áspera, patas cortas y pelaje suave y espeso en distintos colores. Además de esta definición formal, el español cuenta con una variedad de formas cariñosas para referirse a los felinos.
Uno de los términos más populares en países hispanohablantes, como Argentina, es “michi”, una palabra ampliamente usada en el habla cotidiana, aunque no registrada oficialmente en el diccionario. Esta denominación refleja el lazo especial que tenemos con los gatos y es utilizada en muchas regiones de habla hispana.
Otras formas reconocidas de llamar a los gatos
La RAE también menciona otros nombres populares, entre ellos:
- Minino
- Michino
- Cucho
- Micho
- Morrongo
- Morroño
- Mozo
Si bien algunas de estas palabras son más comunes en determinados países, todas comparten el mismo significado de ternura y afecto hacia los felinos.
Además de los nombres cariñosos, existen expresiones específicas para referirse a estos animales en distintos contextos:
- Gato callejero: felinos que viven en la vía pública.
- Gato doméstico: aquellos que disfrutan del calor del hogar.
- Gato montés: especies felinas salvajes.
- Gato, en sentido figurado: en algunos países, se usa para describir a personas astutas o ágiles.
Hoy es un gran día para celebrar a nuestros amigos felinos, sin importar cómo los llamemos. ¡Dales muchos mimos y croquetas en su día especial! 🐱❤️