El padre Luis Gabriel Romero Ramírez, encargado de la economía del Seminario Conciliar San Rafael Arcángel, de esta ciudad, dio a conocer que continúan buscando recursos económicos, luego de los daños que sufrió la institución tras el sismo del 19 de septiembre de 2017.
“Todos los edificios del Seminario Mayor y Menor fueron afectados, en su mayoría fueron bastante dañados, entre los que más, se encuentran los salones de ambos seminarios, los tres dormitorios del Menor, las dos capillas, la biblioteca del Seminario Menor y los dormitorios de los sacerdotes”, detalló.
Después de dichas afectaciones, mencionó que se tuvieron que adaptar en los espacios menos dañados, por los daños a los dormitorios, prácticamente los estudiantes y sacerdotes dormían cerca de los accesos, con la puerta abierta y orando para que no se presentara otro sismo.
“Luego nos dimos a la tarea de hacer una valoración de los daños por medio de un arquitecto, se solicitaron los permisos para reconstruir y una vez que se hizo el proyecto, se procedió con lo más fuerte que es la búsqueda de recursos económicos”.
Abundó: “Dividimos el proyecto por partes, conscientes de que no íbamos a poder hacerlo todo junto y buscamos apoyo fuera de la Diócesis porque de acá se dañaron casi todos los templos, entre ellos, la Catedral, el Sagrario, el Calvario, el de Guadalupe y eso iba a requerir también mucha inversión; además de la que se está haciendo para el Templo de San Juan Pablo II”.
Gente de Tlaxcala, Puebla, Tehuacán, Estados Unidos y algunos sacerdotes de Huajuapan han apoyado con sus donativos para la reconstrucción del seminario, y por eso es que, unidas todas las fuerzas, en un año (de enero de 2018 a enero de 2019) se logró avanzar con el 80 por ciento de la reparación de los daños.
El 20 por ciento restante, que se han propuesto culminar en un año, implica el comedor del Seminario Menor, del Seminario Mayor falta reconstruir el comedor, la biblioteca, la recepción y el edificio del auditorio, además del edificio donde están los dormitorios de los sacerdotes.
Para ello, se estimó que falta un millón y medio de pesos, por lo cual, han estado solicitando el apoyo económico en fiestas patronales de la Diócesis y el párroco Xavier Hernández, encargado del Sagrario, les permitió también hacerlo en la fiesta en honor al Señor de los Corazones.
“La verdad acá, aunque se recauda menos, la gente lo da de corazón, tenemos que reconocer que en la Mixteca tenemos menos posibilidades económicas y los donativos van de un peso a 20 pesos, en promedio, en otros lugares pueden aportar más porque ellos tienen más fuentes de empleo y mejores condiciones, por eso hemos pedido apoyo fuera, pero todo cuenta, cada peso es importante”, mencionó.
