Aunque el hallazgo de tomas clandestinas de gasolina por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex) se incrementó 38.3% de 2016 a 2017, Oaxaca se mantiene como uno de los estados en donde menor incidencias se registran.
Un reporte de la empresa dado a conocer ayer señala que en Oaxaca se hallaron el año pasado 59 tomas clandestinas, mientras que en Guanajuato, el estado que lidera la lista, se encontraron 1,696. En total Pemex detectó en 2017 9,509 puntos de robo de combustible.
En total, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto se han encontrado 29,807 tomas clandestinas, no obstante la petrolera reserva los lugares en donde se han hallado por razones de seguridad financiera.
A Guanajuato le siguen Puebla, con 1,343 tomas clandestinas; Tamaulipas, con 1,033; Hidalgo, 948; Veracruz, 925; y Estado de México, 919. Once entidades reportaron menos de 10 o ninguna toma clandestina.
El pasado 9 de octubre Pemex reportó un derrame de gasolina provocado por una toma clandestina en el kilómetro 168+800 del poliducto Minatitlán-Salina Cruz en el municipio de El Barrio de la Soledad, Etla.
En agosto pasado, Seguridad Pública estatal informó la detención de 16 presuntos integrantes de una banda de robo de combustibles que opera en el estado.
Pemex ha reportado que las pérdidas que genera el robo de combustible en el país alcanzan los 30 mil millones de pesos anuales. De acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación el robo representa el 8 por ciento de la producción total de gasolinas en el país, de 325 mil 300 barriles por día en 2016. Esta cifra quiere decir que de cada 100 litros ocho terminan en el mercado negro de las gasolinas.
