Huajuapan de León, Oaxaca. – Personal del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) denunció una serie de anomalías en centros coordinadores, entre ellos, el de la región Mixteca.
En el Centro Coordinador de los Pueblos indígenas de Silacayoápam, que dirige Yanet S. H. A., informaron que hubo despidos injustificados, humillaciones y explotación laboral.
En el Programa para el Fortalecimiento Económico de los Pueblos y Comunidades Indígenas (PROECI), la directora de este centro coordinador es acusada de presuntamente obligar a los productores a comprar sus insumos y herramientas de trabajo con sus amigos.
Otra anomalía denunciada por fuentes de la dependencia es en el área de Cultura; “Y. S. H. A., se encargaría de despedir a dos personas, a quienes nunca les explicó el motivo, pero antes, las humilló y obligó a firmar su renuncia”.
También la acusan de permitir que los vehículos oficiales sean utilizados por el personal que no está autorizado, con lo que violenta las normas y reglas del instituto.
A los promotores del Programa de Apoyo a la Educación Indígena (PAEI), mencionan que presuntamente los explota laboralmente; además de que los obligaría a realizar otras funciones que no les corresponden, como hacer favores a sus amigos políticos y empresarios
“De igual forma, ha impuesto a materialistas, señala con quién deben acudir las autoridades para comprar el material de construcción que se utiliza en los caminos rurales que dirigen a las cabeceras municipales”, acusaron en el anonimato, para evitar represalias.
Dieron a conocer que en los próximos días presentarán sus denuncias de manera formal en la Fiscalía General del Estado de Oaxaca, y sus quejas ante la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO), para que sean atendidas.
También hay denuncias de parte de padres de familia de quienes asisten a las casas de niñez indígena, antes albergues.
Ellos denunciaron haber tenido roces con la titular del centro coordinador, a quien acusan de “hacer proselitismo cada vez que los visita”.
Concluyeron: “Además, lo preocupante es que nadie puede hacerles ninguna observación o propuesta a los directores de los centros coordinadores, porque de inmediato toman represalias contra quien se las emite, presuntamente en total libertad porque presumen de tener el respaldo del director general de la dependencia”.
