Con un llamado a reflexionar sobre el comportamiento en la vida, el arzobispo Pedro Vázquez Villalobos llamó este domingo a la comunidad católica de Oaxaca a llenarse de humildad para perdonar y pedir perdón por los actos cometidos. También a no guardar rencores, pues estos afectan el alma.
En la misa en la catedral de Nuestra Señora de la Asunción, el arzobispo de Antequera Oaxaca también pidió continuar la labor que Jesús encomendó a los apóstoles tras su resurrección: dar testimonio de su existencia y de la salvación prometida por Dios.
“Nosotros también debemos de dar testimonio, tenemos que ir por el mundo dando testimonio. Tal vez, a nosotros Dios no nos pida que derramemos sangre como mártires, pero sí nos pide que demos testimonio de que somos hijos de Dios, de que somos discípulos de nuestro señor. Y a través del testimonio vamos anunciando el evangelio, porque estaremos viviendo lo que un día nos dijo nuestro señor: un mandato nuevo les doy, que se amen”, expresó monseñor antes cientos de feligreses y visitantes.
Al señalar que la meta de la fe católica es el cielo, estar junto a Dios, el arzobispo reiteró su llamado a reflexionar sobre lo hecho en la vida.
“Nos tenemos que preguntar: ¿lo que he hecho a lo largo de la vida me hace ganarme el cielo?”
Hacer el bien, las cosas que agradan a Dios y tener misericordia por las demás personas fueron parte de las sugerencias del arzobispo para tener una vida acorde a la fe, pues consideró que en la actualidad se ha perdido la sensibilidad ante el sufrimiento de otros.
De ahí su exhorto a esforzarse por hacer el bien y ganarse el cielo.
Durante la misa, el arzobispo también llamó a vivir los domingos según la fe católica. Es decir, descansar de las labores, dedicar el día a la familia y acudir a la misa.
Como en cada domingo, el arzobispo agradeció no solo la asistencia de la feligresía católica del estado sino de las y los visitantes de que llegan a la capital oaxaqueña y aprovechan para ser parte de la eucaristía.