De colores amarillo y rojo, así se han teñido los aparadores de varios comercios de la ciudad de Oaxaca. De cara al Año Nuevo y de entre las varias creencias y costumbres para recibirlo, sigue vigente el usar ropa interior o lencería en estos colores para atraer el dinero y el amor, respectivamente.
Sin embargo, en el comercio establecido, el dinero parece no llegar aun cuando los maniquíes portan atuendos al estilo navideño o en tonos rojos con aplicaciones varias para atraer a la clientela.
Comerciantes como Alba Ruiz señalan que cada año, la venta de prendas en colores amarillo y rojo (en ropa interior y lencería) son parte de los rituales que se acostumbran en Oaxaca y otras partes del país.

Sin embargo, reconoce que las ventas han disminuido debido a que actualmente hay más canales o vías para el comercio, entre ellas las plataformas digitales, además de que tienen en el comercio en vía pública o informal una competencia, o porque hay más negocios dedicados a la venta de ellos.
La publicidad ya es a través de Tik tok y tenemos que estar actualizados en eso. Tenemos que entrar a las redes sociales”, ahonda la vendedora sobre un nuevo contexto al que se enfrentan como comerciantes establecidos.
En cuanto al comercio en la vía pública, explica que los precios a veces son más bajos que en el comercio establecido, pues al no pagar impuestos, servicios y salarios los vendedores informales pueden ofrecer algo más accesible.

Con varios años establecida en la calle J. P. García, en el centro de la ciudad, Alba refiere que la demanda de estos productos no es como en los años previos. Aunque sí hay ventas en prendas amarillas y rojas, que suelen ser los colores más solicitados en los últimos días del año: “el rojo es para el amor y el amarillo, para el dinero”.
Tanto jóvenes como personas adultas buscan estos productos, independientemente de sus géneros, pues a decir de la comerciante son solicitados para regalos y también para sí mismos.