Regidurías, oficinas fantasma; ausentismo y desatención
Regidores como Pablo Puga y Joaquín Galguera son de los más ausentes en el horario laboran
Con pasillos y salas de espera en las que por momentos hay decenas de personas que buscan pasar para pagar sus impuestos, revisar los montos de sus cobros o si se les puede hacer un descuento, así se observa el palacio municipal de Oaxaca de Juárez.
Sin embargo, aun cuando en las cajas recaudadoras las filas parecen avanzar o la atención sí se otorga en diversas áreas, las regidurías son las oficinas en las que resulta complicado encontrar a varios regidores o regidoras.
En las primeras semanas de enero, ante la solicitud de permiso, la regidora Jocabed Betanzos Velázquez fue una de las más difíciles de localizar. Pero regidores como el de salud y sanidad, Pablo Alberto Ramírez Puga, así como el de medio ambiente, Jesús Joaquín Galguera, son de los que más ausencia de sus funciones muestran en el palacio municipal.
En este inmueble, el constante el ir y venir de la ciudadanía, pero muchas personas se encuentran con que estos y otros regidores no siempre están o que no tienen horario fijo. Incluso cuando se trata de los días de sesión (jueves) varios se ausentan o se van tan pronto acaba la sesión.
En un ejercicio realizado este jueves previo a la sesión ordinaria, hallar a las y los concejales en sus oficinas fue complicado debido a que llegan directamente a la sesión previa. Tras concluir esta, varios regresan a sus oficinas, como es el caso de la síndica primera, Nancy Mota, o las regidoras de Hacienda y de Seguridad, Judith Carreño y Claudia Tapia, respectivamente.
Pero otros más como Joaquin Galguera o Pablo Ramírez Puga se habían ausentado al finalizar la sesión, incluso cuando apenas eran poco más de las 13:00 horas.
Al buscar al regidor de Salud, su personal solamente respondió que este no tenía horario de llegada o de atención, por lo que era complicado que atendiera a la ciudadanía.
En el caso del regidor de Protección Civil, la tarde de ayer había al menos tres personas esperando su atención, mientras en el interior el concejal despachaba a otros ciudadanos. Quienes aguardaban decían que ya los habían contemplado y que su espera aún era de minutos.
