Los trabajos de la obra pública de los ejercicios 2022-2024 y otros forman parte de “un proyecto de rescate y conservación” del centro histórico, señala la secretaria de Obras Públicas y Desarrollo Urbano de Oaxaca de Juárez, Denisse Arandia, quien refiere que una de las últimas es la del andador semipeatonal de la calle Carlos María Bustamante.
Esta ampliación de las banquetas sigue el ejemplo del andador semipetonal de la calle García Vigil, paralelo a Macedonio Alcalá. Esta última una vialidad mayormente peatonal desde hace unas décadas.
Con 14 millones 773 mil 95.16 pesos para el nuevo andador, el presidente municipal, Francisco Martínez Neri, explicó que lo que se busca es que “la parte sur también luzca tan bonita como la parte norte” del centro histórico y que se dé prioridad al peatón. Aunque también reconoció que el nuevo andador, un proyecto que ya se vislumbraba en 2006 de acuerdo con vecinos, “es parte de la zona turística” y por lo cual se busca que ahora se camine “al sur”.
Al exponerle sobre los riesgos que este mejoramiento urbano podría traer para esta calle, al desplazar por negocios más turísticos a los comercios en pequeño y de interés local (que por ahora son papelerías, tiendas de ropa, de fotografías y otros), el edil reconoció esta posibilidad. Pero dijo que no por ello se pueden dejar de hacer las obras públicas.
Es un problema de gentrificación, un asunto que tiene que ir más allá de lo ordinario, que tiene que ir a lo legislativo, a la parte educativa…” respondió.
En esta vialidad, las dos primeras cuadras ya están prohibidas para el comercio en vía pública desde el 2022. Aunque del tramo que va de Aldama hasta Zaragoza, donde está proyectado el nuevo andador, todavía hay puestos semifijos.
A decir de la secretaría de Obras Pública municipal, la intervención en Bustamante es para “favorecer la urbanización sostenible del centro-sur del centro histórico”, además de priorizar a las y los peatones. Aunque se mantendrá el paso vehicular en un solo carril y se contemplan bahías de carga y descarga, así como mobiliario y arbolado adecuados.
Esta obra se suma a las que en el actual ejercicio abarcan la rehabilitación del pasillo de humo del mercado 20 de Noviembre y del mercado Benito Juárez, ambos también de interés turístico.
De acuerdo con Arandia, todas forman parte de la recuperación del centro histórico (que cuenta con declaratoria de Patrimonio Mundial) y se suman a la rehabilitación de la calle 20 de Noviembre, la recuperación de nueve pilas y fuente históricas, así como la rehabilitación de una parte de la Alameda de León.
Aparte de la obra pública, otras acciones de “rescate integral del centro histórico” son las del programa “Rescatando el corazón del centro histórico” y por el cual se han rehabilitado banquetas y pasos peatonales.
