Parques y jardines de Oaxaca en el abandono
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Parques y jardines de Oaxaca en el abandono

Arbolado y pastos secos abundan en jardines y parques de la capital oaxaqueña


  • Parques y jardines de Oaxaca en el abandono
  • Parques y jardines de Oaxaca en el abandono

A la par del descuido y falta de atención al arbolado del zócalo y la Alameda de León, otros parques y jardines de la ciudad de Oaxaca se mantienen en el abandono. Y esto se observa en áreas donde la vegetación luce marchita o prácticamente muerta.

A esta situación se suman la contaminación y el deterioro generalizado de sus fuentes, esculturas y pisos. El Paseo Juárez El Llano, así como los jardines Morelos y San Pablo son muestra de ello.

En el primer sitio, incluso las cactáceas habituadas a climas áridos se han secado, al igual que las plantas con que comparten espacio en las jardineras del lado de la iglesia de Guadalupe. Sábilas (aloe vera) y pastos también guardan una apariencia similar, lo mismo que una palmera y árboles.

BASURA REGADA

El abandono de basura también es una de las problemáticas observadas en el sitio que cuenta con esculturas de leones y una estatua al oaxaqueño Benito Juárez. O en donde yace un árbol para el que el fallecido artista Francisco Toledo diseñó una reja de protección.

Aunque a raíz de la emergencia sanitaria de Covid-19 el Ayuntamiento determinó que las fuentes solo conservarían una cantidad mínima de agua para las aves y demás fauna urbana, tanto en este parque como en los jardines Morelos y San Pablo estos depósitos estaban secos la mañana de ayer.

DETERIORO EVIDENTE

Como en El Llano, donde las esculturas de leones lucen deterioradas, en el jardín Morelos una representación del caudillo José María Morelos lucía descuidada. Además de que las áreas donde queda parte del pasto estaban contaminadas con heces de perros y basura. Las plantas también lucían marchitas.

Aunque diversos activistas y especialistas han señalado el descuido y deterioro del arbolado urbano, en su totalidad o el 90 por ciento, en estos tres sitios siguen habiendo ejemplos de árboles o palmeras secas, algunos inclinados como los laureles del zócalo. 

En casos como estos, según han señalado ambientalistas o incluso como ha reconocido la autoridad, los daños se deben a plagas o la falta de nutrientes en las jardineras.