Llaman a reponer los árboles caídos en el zócalo de Oaxaca

Existe confianza que la podas que se están realizando en árboles del Zócalo de la ciudad tengan la valoración técnica necesaria para no perjudicar su desarrollo, ante la necesidad de mirar hacia un futuro sustentable.

Tras realizar un llamado a cuidar y proteger el arbolado de la capital, el Patronato Pro Defensa del Patrimonio Cultural y Natural del Estado de Oaxaca (Pro-Oax), aseguró que tanto la reforestación como el cuidado del suelo y las plantas es vital para mantener nuestros ecosistemas sanos.

También se requiere la reposición de ejemplares en áreas arboladas como el Paseo Juárez El Llano, el Jardín Conzatti y otras zonas.

Los árboles protegen al suelo de la erosión, producen oxígeno, captan agua, protegen del ruido, regulan la temperatura, también son barreras contra el viento, mejoran el paisaje, dan sombra, retiene contaminantes, entre otros aspectos, dijo José Márquez.

Explicó que en las ciudades son principalmente responsables de proporcionar parte del oxígeno que respiramos y eliminar dióxido de carbono, además, reducen la velocidad del viento y la contaminación ocasionada por el ruido.

De acuerdo con la Dirección de Ecología y Sustentabilidad del Gobierno Municipal de Oaxaca de Juárez, cada uno de los dictámenes de arbolado que se han emitido se basan en lo dispuesto por la Norma Ambiental Estatal NAE-IEEO-003-2008 y el Reglamento de Arbolado Urbano para el Municipio.

Estos ordenamientos establecen los requisitos y especificaciones técnicas para la poda y derribo de árboles urbanos, que deberán cumplir las autoridades municipales, dependencias públicas, personas físicas y morales en la entidad.

Según el artículo 14 del Reglamento de Arbolado Urbano para el Municipio de Oaxaca de Juárez vigente, el derribo se autoriza porque las condiciones naturales del árbol representen un riesgo a los transeúntes o habitantes de los lugares contiguos, por falta de estabilidad del suelo en que se ubica, pérdida grave del equilibrio del árbol o debido a que los daños causados al árbol sean de difícil control o reparación y cuando el árbol esté totalmente seco.

De la misma manera establece que cuando se derribe un árbol deberá compensarse sembrando otro u otros, dependiendo del tamaño y antigüedad del ejemplar, ya sea persona física o moral.

La Dirección de Ecología y Sustentabilidad, constatará que esto se lleve a cabo con la finalidad de compensar los daños ambientales por la justificable necesidad del derribo del árbol.